Reino Unido: inician ensayo de una vacuna infectando personas sanas con coronavirus
El objetivo inicial del equipo investigador será descubrir cuál es la dosis mínima del virus necesaria para que el grupo de voluntarios seleccionado termine infectado.
La carrera por obtener la primera vacuna contra el coronavirus desata polémicas en el Reino Unido. Las autoridades han aprobado un ensayo en personas sanas, las cuales serán inoculadas con el Sars-Cov-2 con el fin de acelerar el desarrollo y la eficacia de la potencial vacuna.
La intención del Gobierno de Reino Unido es destinar 37 millones de euros a la puesta en marcha de uno de los llamados Human Challenge Studies (Estudios de Desafío Humano), en los que se suministra una potencial vacuna, que haya demostrado ser segura en ensayos previos, a un número reducido y cuidadosamente seleccionado de adultos previamente infectados con el virus.
Este programa comenzará a partir enero, siempre que se obtenga la aprobación de la Agencia Reguladora de Medicamentos y Terapias británica (MHRA, en sus siglas en inglés).
Las autoridades sanitarias del Reino Unido han unido fuerzas para este proyecto con el Imperial College de Londres, la fundación Royal Free London NHS y con la empresa de laboratorios y ensayos hVIVO, una filial de Open Orphan, multinacional especializada en el ensayo de vacunas y antivirales a través del método del Desafío Humano.
“En primer lugar, para el caso de aquellas vacunas cuyo desarrollo se encuentra en una fase media, los estudios de desafío humano pueden ayudar a seleccionar entre ellas las más prometedoras, para impulsarlas hacia una Fase 3 de ensayos”, explicó Jonathan Van-Tam, el subdirector médico jefe del equipo que asesora al Gobierno británico.
“Y en segundo lugar, para aquellas vacunas más desarrolladas y que ya han demostrado su eficacia, estos estudios nos pueden ayudar a determinar si las vacunas previenen tanto la transmisión como la propia enfermedad”, precisó.
En concreto, el objetivo inicial del equipo investigador será descubrir cuál es la dosis mínima del virus necesaria para que el grupo de voluntarios seleccionado acabe infectado, a través de la inoculación gradual del patógeno; es decir es la fase que se denomina “estudio de caracterización del virus”.
Estos primeros pasos se realizarán con un número de entre 30 y 50 individuos sanos. Las pruebas se llevarán a cabo en la unidad de alto aislamiento del Royal Free Hospital de Londres. Las entradas y salidas al centro son controladas estrictamente, las tareas de descontaminación de cualquier resto son exhaustivas, y todo el aire saliente de la unidad destinada al ensayo pasa por un proceso de filtración para evitar que se traspase riesgo alguno al exterior.