Una nueva represión de las fuerzas israelíes dejó varios palestinos muertos

Por segundo viernes consecutivo, miles de palestinos salieron hoy a las calles en los territorios ocupados a protestar contra la decisión estadounidense de reconocer a Jerusalén como la capital israelí, y otra vez fueron reprimidos por las fuerzas de seguridad de Israel, dejando un saldo de cuatro muertos y cientos de heridos. 

Alrededor de 3.500 palestinos se manifestaron en nueve lugares a lo largo de la frontera entre Gaza y el sur de Israel, según las Fuerzas de Defensa de Israel, quien los acusó de tirarles neumáticos prendidos fuego y piedras. 

El gobierno palestino en Gaza denunció que las fuerzas israelí dispararon contra las pequeñas concentraciones de palestinos y mataron a dos de ellos, Yasser Sukar, de 32 años, e Ibrahim Abu Thuraya, de 29. Este último tenía las dos piernas amputadas y usaba una silla de ruedas. 

Además, 164 palestinos resultaron lesionados por heridas de balas y efectos de los gases lacrimógenos, según consignó la agencia EFE. 

En Cisjordania y Jerusalén este, en tanto, otros 2.500 palestinos salieron a las calles para reiterar su reclamo sobre la ciudad santa. Un palestino, identificado por el Ministerio de Salud palestino como Mustafa Basel, de 29 años, falleció por la represión, mientras otras 103 personas resultaron heridas. 

Al mismo tiempo, un joven palestino, identificado como Mohammed Aqal, de 29 años, murió luego de intentar acuchillar a un soldado israelí cerca de la ciudad de Ramallah, la sede del gobierno palestino, en Cisjordania. 

Los palestinos reclaman a Jerusalén como su capital también y, a partir de la decisión de Trump, todo el mundo islámico se unió al reclamo de que el mundo reconozca a la parte oriental de esa ciudad como la capital del futuro Estado palestino.