CFK arma las valijas y Cristóbal López, negociados

Mientras Cristina Kirchner prepara las valijas en la residencia de Olivos y desarma su oficina en la Casa Rosada, ya que en poco más de tres semanas pasará al llano, el empresario amigo de los K, Cristóbal López, continúa haciendo sus negocios.

Tras haber cerrado la compra de la aseguradora Generali, esta semana López selló un acuerdo con Total, una empresa francesa de lubricantes, para que los productos del grupo europeo desembarquen en su red de estaciones de servicio. 

Según se informó, se trata de la primera vez que los productos de Total se venderán en bocas de expendio de una marca petrolera. En este caso de Oil Combustibles, la red que el dueño del Grupo Indalo, Cristóbal López, creó tras la compra de una parte de los activos locales de Petrobras. 

Los lubricantes Total y Elf comenzarán a comercializarse en las 350 estaciones de servicio Oil a partir de diciembre. La alianza le permite a la petrolera contar con una marca de lubricantes y a Total acceder a un sector que representa el 10% de las ventas de este tipo de productos en el país.

Como se recordará, López, también conocido como el zar del juego, está en la mira de la justicia en la causa Hotesur. 

El empresario habría pagado $ 1,2 millones por mes a dos socios de Máximo Kirchner, en concepto de alquiler de inmuebles y maquinarias, y por brindarle “asesoramiento inmobiliario”. 

Hotesur, la causa en la que se investiga la empresa de la familia presidencial y una supuesta maniobra para blanquear dinero a través de la contratación de habitaciones vacías, es una verdadera caja de Pandora, una oscura síntesis de este tiempo, en la que se funden sospechas de corrupción, lavado de dinero y coimas entre funcionarios y amigos. 

Además, López ha buscado, y lo sigue haciendo, quedarse con millonarios negocios en la AFA.