Polémico acuerdo con Mekorot
Denuncian negociados con medidores de agua en la Provincia
Así lo advirtieron profesionales de carrera del Ministerio de Infraestructura. Alertan que los artefactos serán suministrados por una sospechosa empresa estatal israelí y encarecería notablemente el costo del servicio, en momentos en que se ultiman detalles del tarifazo que instrumentará ABSA
En momentos en que la empresa ABSA ultima los detalles para el fuerte aumentos de tarifas, profesionales de carrera del Ministerio de Infraestructura bonaerense salieron a denunciar un oscuro acuerdo que se habría sellado, entre gallos y medianoche, entre el gobierno de María Eugenia Vidal y la empresa estatal israelí Mekorot. Se trata de la misma sociedad que, durante la gestión de Daniel Scioli, hizo un fuerte lobby junto al Sindicato de Obras Sanitarias bonaerense (Sosba), que conduce Julio Castro, para quedarse con un negociado millonario vinculado a la construcción de una planta potabilizadora en Punta Lara.
En diálogo con Hoy, el ingeniero Adolfo Ruiz, profesional de carrera del Ministerio de Infraestructura bonaerense y delegado general del gremio ATE, alertó que estaría todo cocinado para que se instalen “medidores domiciliarios de alta sensibilidad”. Se trata de artefactos muy similares a los que funcionan en Israel, que serían suministrados por Mekorot y cuyo costo de compra e instalación estaría a cargo de los usuarios. “Esto traerá aparejado un gran aumento de la tarifa. Estos medidores poseen una precisión tal que pueden detectar y facturar por la caída de una gota de agua, algo impensado para los medidores normales que se usan actualmente en el país. Esa exactitud extrema se contrarresta con la pérdida irracional de más del 40% del caudal de agua limpia que se desperdicia desde la planta potabilizadora de Ensenada hasta el servicio domiciliario por el deplorable estado de la red de distribución”, dijo el ingeniero.
La red, que tiene caños de plomo de más de 100 años en distintos puntos de la región, es un aspecto medular que según los expertos justifica el por qué una obra como una planta potabilizadora carece de sentido hasta tanto no se renueve el sistema de distribución. En otras palabras, es imposible mejorar la potabilización del agua si el líquido sigue atravesando cañerías derruidas.
Ruiz agregó: “ese 40% no le interesa a la empresa ABSA ya que ese caudal perdido por su mal manejo lo pagamos todos con nuestros impuestos. No pasa por el medidor y por lo tanto no factura. Tan grande es esa pérdida que para no entrar en el conocimiento de lo que se pierde directamente no lo mide ABSA lo cual es una desprolijidad mayor.
Ruiz también alertó que “es dable saber que los tenores de cloro y la calidad final del agua suministrada por Mekorot son menores que el requerido por nuestro Código Alimentario Nacional y con eso traería aparejado una posible contaminación bacteriana en los barrios periféricos, donde el suministro se brinda en forma carente de inspección. Esto se debe a la precariedad de obras clandestinas que realizan los vecinos ante la falta de obras públicas para acceder a este recurso vital humano”.
Ante la denuncia de los profesionales, fuentes de cercanas a Vidal, consultadas por Hoy, dijeron que “no hay ningún acuerdo con Mekorot”, pero reconocieron que representantes de la empresa “fueron recibidos una vez” por el gobierno bonaerense. Cabe preguntarse entonces: ¿por qué no se dio a conocer la información del encuentro?, ¿cuál fue el motivo de la reunión?
Cáscara vacía
El hecho de que el gobierno bonaerense reciba a una empresa como Mekorot, que fue denunciada por Amnistía Internacional por el manejo criminal del recurso hídrico en Medio Oriente, resulta por demás polémico. Y más cuando esa misma compañía mantuvo oscuros vínculos con el gobierno sciolista. Tal como lo reflejó Hoy, desde que fue fundada en el año 2002 ABSA fue y sigue siendo una cáscara vacía regenteada por dos empresas privadas: la firma 5 de Septiembre SA, presidida por Castro, y Gral Saneamiento, cuyo titular es el polémico empresario Marcelo Salinas, ex esposo de la vedette María Eugenia Ritó a quien conoció, según reconoció públicamente la propia Ritó, como cliente de sus servicios sexuales. En el juicio de divorcio la vedette le reclamó a Salinas un barco en Punta del Este, un departamento en la misma ciudad, otro en Miami y tres en Buenos Aires; además, tres autos de alta gama.
Para que se concrete este oscuro negociado de la planta potabilizadora, una obra estimada en 150 millones de dólares, el gobierno de Scioli hizo en el año 2012 una licitación escandalosa al punto tal que, cuando se estaba realizado el proceso de adjudicación, estaba reunido con representantes de la empresa israelí en su despacho. Eso no fue todo: la alternativa a Mekorot fue presentada por Odebrecht, una empresa brasileña que supo hacer polémicos negocios con Julio de Vido y cuyo ex presidente fue condenado a 19 años de prisión en el vecino país en el marco del escándalo judicial que involucra a Petrobras.
Finalmente, la obra de Punta Lara habría sido adjudicada a una UTE conformada por la mencionada Mekorot, la empresa 5 de septiembre SA que conduce Castro, la firma Mako SA que encabeza Salinas y la sociedad Eleprint, que tiene como uno de sus máximos directivos al actual vicepresidente de Estudiantes de La Plata, Pascual Caiella.
La mira puesta en Bahía Blanca
Otro interés que tiene la firma Mekorot es la construcción del Acueducto Río Colorado que brindaría de agua dulce a Bahía Blanca y 11 localidades. Se trata de un conducto de 1, 20 m de diámetro de alrededor de 120 kilómetros de longitud, paralelo a la Ruta Nacional No 3, desde Pedro Luro hasta Bahía Blanca. El proyecto contempla instalar una planta potabilizadora con capacidad máxima de bombeo de 2 m3 /seg. “Nuevamente entra en el análisis el manejo de temas calidad de agua potable. Resulta muy cuestionable querer hacer una planta depuradora cuando estamos ante una empresa (Mekorot) que no respeta los estándares de potabilización del país y que usa elementos propios una región desértica que no se adapta a esta zona”, dijeron especialistas de carrera del Ministerio de Infraestructrura.
