El kirchnerismo perdió hasta en su propia tierra

Favorecido por la grieta entre el FpV y el PJ, el candidato radical Eduardo Costa renovó su banca como Diputado Nacional con más del 40% de los votos. La ausencia de Cristina y la violencia pre-electoral

No fueron profetas ni en su tierra. Paradójico es que la cuna del Frente para la Victoria (FpV) haya sido el terreno más difícil para la Casa Rosada: por primera vez desde que Néstor y Cristina Kirchner lo fundaron, el FpV se presentó por separado del Partido Justicialista (PJ), comandado por el gobernador Daniel Peralta –duramente enfrentado con el kirchnerismo-, al tiempo que la figura del candidato de Unión para vivir mejor (UCR), Eduardo Costa, crecía. En tierra de propios, Costa ya no es tan extraño y lo demostró con un rotundo triunfo del 42, 22%, relegando al segundo lugar al FpV –encabezado por Mauricio Gómez Bull- que con el 24, 69%, apenas superó al PJ de Peralta, que llegó al 20, 04 %.

En cuarto y quinto lugar quedaron Omar Latini, del Partido Obrero, con 11, 11% y Emilio Poliak, del MST, con 1, 95%. 

La derrota

El kirchnerismo vio cómo en su propia tierra el radicalismo repitió el triunfo logrado en las legislativas de 2009, permitiéndole a Costa renovar, a partir del 10 de diciembre, su banca en la Cámara de Diputados y posicionándolo de cara a la Gobernación 2015. 

En tanto, la segunda banca será ocupada por la también radical Susana María Toledo, mientras que la banca restante será para Gómez Bull. 

“Fue un triunfo contundente”, celebró Costa, quien, antes, tras emitir su voto, había recordado que el miércoles se cumplen 30 años de la elección que significó el regreso a la democracia y el triunfo de la UCR, con Ricardo Alfonsín. En ese marco, bogó por la "unidad de todos los santacruceños", en clara referencia a los hechos de violencia que marcaron a la capital natal del kirchnerismo en los días previos a la jornada de elecciones: durante la última semana, en medio de negociaciones paritarias entre el gobierno santacruceño y los gremios estatales, un grupo de manifestantes incendió un edificio público; se intentó hacer lo mismo en el Hospital Regional y hubo una intensificación de los reclamos sociales. “El kirchnerismo está buscando que haya un muerto”, llegó a afirmar el Gobernador Peralta, quien durante la jornada de ayer también habló del “fin de un ciclo” (Ver aparte).

En las PASO, Unión para Vivir Mejor había alcanzado el 44,45% y el FpV el 23,94%, superando apenas al PJ encolumnado detrás de Peralta, que logró el 21,40%. Como en casi todo el país, Santa Cruz ya no es tierra K.