La mentira de las obras hídricas en La Plata

Increíblemente, la presidenta Cristina Kirchner dio como terminada la obra del entubamiento del arroyo El Gato, aunque la misma no ha concluido y falta que se realice buena parte de ella. Las falsedades de un discurso que se amolda al relato y niega la realidad

Uno de los graves retrocesos que dejará la mal llamada década ganada a la institucionalidad del país, será el doble discurso imperante en el poder, que desde los atriles suelen esbozar una cosa, pero la verdad indica que todo lo que dicen es falso o difiere en buena forma de la realidad.

Muestra cabal de esto fue la interminable cadena nacional que brindó ayer la presidenta Cristina Kirchner, donde dio paso a una revisión de las obras hidráulicas que se realizaron en el país en los últimos 12 años para frenar el drama de las inundaciones, y dio como ejemplo de esas obras el entubamiento del arroyo El Gato en la ciudad de La Plata, una faena que está a medio hacer y de la cual todavía resta ejecutar más de la mitad de la misma.

Las obras que viene realizando el gobierno parecen ir en carreta, mientras el vértigo de la realidad va en avión. La Presidenta precisó que la inversión del Fondo Hídrico desde 2003 "fue de 10.472 millones de pesos en 511 obras", a lo que siguió sin ponerse colorada que “hicimos 4.880 obras por 122.387 mil millones de pesos, de los cuáles más de 60 mil millones de pesos fueron sólo a la provincia de Buenos Aires para obras hídricas”.

Tocando fondo

Luego de las inundaciones de abril del 2013, la presidenta Cristina Kirchner había afirmado que "cuando era muy chica mi casa se inundó. Sé lo que es perder todo. Pasó cuando todavía no estaba entubado el arroyo El Gato”. Casi dos años y medio después de esas palabras, la situación del arroyo sigue igual y no se ha terminado el entubamiento prometido.

Con motivo de esa tragedia, y por medio de la Ley Nº 14527 se autorizó al Poder Ejecutivo a endeudarse hasta 1.973 millones de pesos, con el objeto de financiar la reconstrucción de la infraestructura dañada y/o la realización de obras, entre ellas el entubamiento de dicho arroyo.

A pesar de que en sus palabras de ayer la Jefa de Estado habla de un Estado en crecimiento, la realidad es que para estas obras se tomó un préstamo a tasas blandas, yendo a contramano de su discurso. Además, este crédito tenía plazos de desembolsos de subpréstamos por 3 años, habiéndose desembolsado sólo 151 millones de pesos en 2014, y para este año se presupuestaron 454 millones, y para el año que viene 117 millones. Es decir, aún debe ejecutarse el 64% del crédito. En diálogo con Hoy, el Ingeniero Hidráulico y docentes de la Universidad Nacional de La Plata, Pablo Romanazzi, aseveró que “cuando se dice que la obra del arroyo El Gato está terminada, eso no es correcto, no está concluida, está en ejecución, recién tiene un porcentaje inicial de construcción y está lejos de concluir, falta mucho todavía, hay tramos que todavía no se han empezado”. Según el investigador de la UNLP, “en lo que es el curso principal de El Gato, se maneja como siempre a cielo abierto, lo que se está haciendo es ensanchar su cauce y revestir con una estructura de hormigón todo su perímetro mojado. Pero los derivadores que se conectan con ese canal principal, lo que son los ramales del sistema, la mayoría se están construyendo como construcciones cerradas, algunas circulares y otras rectangulares. Pero falta mucho, aún no se ha concluido”.

Un cuento engañoso

Con sólo hacer un recorrido por el arroyo El Gato, puede observarse que lo declarado ayer por Cristina Kirchner dista mucho de estar acorde con la realidad, y que la obra, al contrario de lo que dice la presidenta, se encuentra a mitad de camino y tiene un largo trecho por recorrer todavía.

El Ingeniero Pablo Luchessi, ex secretario general de la UNLP, le dijo a Hoy que “Cristina podrá decir muchas cosas, como por ejemplo que ha construido el entubamiento del arroyo El Gato, cuando vemos que no es así. No es un entubamiento si no es que una obra a cielo abierto, que no está terminada ni mucho menos, cómo máximo estará a un 35 o 40 por ciento”. Para el especialista en Ingeniería Sanitaria, “lo que dijo la presidenta es parte del relato, le habla a los fanáticos que suele llevar a que la escuchen, habla para la tribuna que la aplaude, nada más. Es una mentira más del relato y la misma tiene patas cortas. Es una falacia lo que dice sobre los números que se han invertido en la Argentina en materia hidráulica, son obras que no se han hecho. Sobre hechos verdaderos induce a conclusiones falsas”, sentenció.

El plan hídrico no se llevó adelante con la celeridad que se tendría que haber llevado y el relato oficial habla de un país pujante con obras concluidas que en realidad no han terminado o ni siquiera empezaron a hacerse. La obra en el arroyo El Gato es una de ellas y está más palpable que nunca, más allá de que la ficción K se empeñe en hacer creer otra cosa.

Falsedades oficiales

En su cadena nacional, Cristina Kirchner recordó su pasado platense y rememoró cómo cuando ella era chica se inundaban Berisso y Ensenada, y como ahora “ya no pasa eso” por las obras que se han hecho.

Otra vez la realidad muestra cómo las palabras de la Jefa de Estado son erradas, ya que ante cada lluvia fuerte, las evacuaciones en ambas ciudades son constantes por la falta de obras realizadas para detener esta espantosa realidad.

A eso se le suma la cantidad de obras que se han iniciado y que están viciadas muchas veces por la corrupción que se esconde detrás de las mismas, tal como ocurre con el terraplén costero en Berisso, donde a una cifra presupuestada en un comienzo en poco más de 60 millones, las autoridades habrían desembolsado ya más de 200 millones de pesos, una cifra escandalosamente superior.
La obra en la capital del inmigrante está tan mal pensada, que el terraplén se encuentra a una altura superior que el resto de la ciudad, y tiene apenas cinco estaciones de bombeo con escasa capacidad de escurrimiento y las alcantarillas son de dimensiones reducidas.