Infección bacteriana
Nuestros hijos, en peligro
Seis víctimas fatales, dos de ellas en la Provincia de Buenos Aires, sumaba ya la bacteria Streptococcus pyogenes, de nomenclatura casi imposible de pronunciar, pero asociada a dolencias tan corrientes como la faringitis o la angina.
Seis víctimas fatales, dos de ellas en la Provincia de Buenos Aires, sumaba ya la bacteria Streptococcus pyogenes, de nomenclatura casi imposible de pronunciar, pero asociada a dolencias tan corrientes como la faringitis o la angina.
La particularidad del último caso radica en que se trata del primer adulto: un hombre de 40
años, oriundo de Pergamino y productor de turismo, que ingresó a una clínica por un cuadro respiratorio que luego derivó en una neumonía con una infección que le causó la muerte.
Al igual que en los casos de los niños fallecidos en los últimos días (una nena en la ciudad de Posadas, en Misiones; otra en Rosario; otro en Río Negro, y otros dos que murieron en el hospital porteño Elizalde), se trató del modo invasivo de la bacteria.
Más allá de esos funestos desenlaces, al cierre de esta edición otros casos se habían registrado en la Provincia: dos niños de 1 y 5 años, oriundos de Bolívar, fueron internados y dados de alta; uno de 4, de Bernal, que continuaba internado; y otro de 5, de Florencio Varela, que permanecía en la Clínica del Niño de Quilmes.
En nuestra ciudad, en tanto, en apenas 24 horas la guardia del Hospital de Niños Sor María Ludovica recibió 450 pacientes. “El doble de los que consultan normalmente”, aseguró a diario Hoy la directora del nosocomio, Viviana Altinier, a la vez que advirtió por la “alerta y el temor” latentes.
Tan honda como la preocupación es la incertidumbre. Pues, aunque se trata de un germen muy común, presente todo el año, pero con predilección por esta época, es la primera vez que se manifiesta con esta severidad. “El problema es la co-infección con otro tipo de virus gripal, como la Influenza A; pero también tratarse de una cepa más agresiva, aún no detectada”, precisó a este diario el médico Fernando Corsiglia, quien recomendó “estar alertas”.
Como Altinier, Corsiglia confirmó que las consultas van en aumento, los padres están asustados y hay mucha incertidumbre. El escenario presenta sus riesgos, aseveró el médico: “Lo primero que hace la gente es correr al hospital público, en los que faltan la higiene, los insumos, los enfermeros y todo tipo de profesionales. Esto no contribuye en nada”, e ilustró: “Si un padre llega a la guardia, y ve un cartel que le anuncia ‘No hay pediatra’ se desespera. Es lógico que suceda, porque una demora de una o dos horas en la consulta puede empeorar el desenlace”.
En una situación óptima, una vez sospechado o detectado el caso, se resuelve rápido. En Argentina, concluyó Corsiglia, la imposibilidad de dar “tratamiento oportuno y diagnóstico rápido siempre puede dificultar todo”.
“Un paciente malnutrido es más propenso a las enfermedades”
Por Julián Barrales - Infectólogo -
“Es una situación que no es habitual. Es un germen que puede estar colonizante, ser parte de lo que es la flora habitual en piel y a veces puede producir lo que se llama shock estreptocócico por Streptococcus que es un cuadro grave, que lleva a un fallo multiorgánico. Se asocia muchas veces con neumonías, puede haber derrames y en estos casos, la particularidad es que hay una sobreinfección en dos de los casos por influenza A. Esto predispone a que el cuadro sea más grave de lo normal, por eso la mortalidad está un poco por encima de lo habitual.
Este germen produce una toxina y hay personas que no tienen anticuerpos para inhibirla. No hay una determinación para saber si la persona va a responder o no, pero esas personas que no logran hacerlo son las que hacen el shock estreptocócico.
Por otro lado, hay que tener en cuenta que un paciente malnutrido es un paciente más propenso a este tipo de infección.
El paciente neonatal es un paciente inmune comprometido porque no tiene la producción de anticuerpos, por eso es importante la vacunación. Pero en este caso no hay vacuna para este germen, aunque sí para todas las demás. Como la de la meningitis, la vacuna que sacaron de los 11 años. Ahí si te puedo decir que las políticas de salud están erradas y en un tiempo se van a ver las consecuencias de todo esto”.
“El sistema sanitario está colapsado, no hay políticas de salud”
Por Marcelo Peretta - Doctor en Farmacia y Bioquímica -
“El sistema de salud está colapsado, no hay políticas de salud. Más allá de esto, lo que corresponde hacer en estos casos es mirar al paciente y tomarle una muestra. Si el profesional duda o cree que puede haber una infección, uno de los métodos es hacer un hisopado. Pero las guardias están colapsadas, entonces miran a los chicos y les dicen a los padres: ‘Dale ibuprofeno y si sigue con fiebre tráemelo mañana’.
Que se muera un chico hoy porque no le hicieron un hisopado, es una evidencia de falta de política sanitaria. Que un funcionario diga que ‘no hay que llevar el pánico’, cuando a los padres se les acaba de morir un hijo es terrible.
Acá hay que ponerse y preocuparse. Las madres tienen que preocuparse porque si hacen seis horas de cola en una guardia y no lo atienden, su hijo está en riesgo. Eso hay que decirlo. No hay que minimizar, no se puede morir un chico por esto. En muchos hospitales no hay insumos, porque los presupuestos se achican, porque los Ceo’s del Gobierno quieren que les den los números y entonces compran menos cosas, menos vacunas”.