Nuevo derrame de la Barrick Gold en San Juan

La empresa canadiense admitió un tercer desborde en territorio sanjuanino, el cual afecta un área periglacial, violando completamente la ley argentina. Acusan complicidades de la minera con las autoridades provinciales y nacionales 

A 15 meses del derrame de más de un millón de litros de solución cianurada en las aguas de diferentes ríos de San Juan, contaminando la región, la empresa de minería canadiense Barrick Gold se ve ahora sumergida en un nuevo escándalo. Ayer, la firma reconoció otro incidente ocurrido el jueves, en este caso un desborde que tuvo lugar en el emprendimiento Pascua Lama, al límite con Chile, que afectó toda un área periglacial defendida por la Ley de Glaciares.

En su descargo, la corporación aseguró que el “incidente” fue provocado por el “deshielo” que afecta a la zona, afirmando sin ninguna clase de pruebas que el mismo no tiene “consecuencias para el medio ambiente o la salud de los trabajadores y habitantes de la región”.

La Barrick informó a través de un comunicado que, “aproximadamente a las 18 horas de ayer (por el jueves), tuvo lugar un evento en Lama, a raíz del deshielo de uno de los inviernos más intensos de las últimas décadas en esa zona de la cordillera. El evento se originó por la crecida del río Turbio, cuyo caudal y arrastre de sedimentos alcanzó la capacidad máxima de las piletas de sedimentación”.

La minera afirmó que “está realizando las tareas de reconducción y el reporte pormenorizado del hecho”. A su vez, recordó que “el proyecto Lama se encuentra suspendido en su construcción y no se realiza allí ningún procesamiento de mineral o proceso industrial”.

Sin embargo, las organizaciones ambientalistas no creyeron en lo más mínimo las palabras de la empresa y desde Greenpeace y la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas reclamaron el “cierre definitivo de las operaciones en la zona Lama/Veladero” y advirtieron que “es el Gobierno nacional el que debe ponerse los pantalones y defender nuestro ambiente”.

Connivencia política

La Barrick Gold ha sabido ser desde su instalación en el país la minera que más beneficios ha recibido por parte de la clase dirigente, levantando airadas quejas de las organizaciones ambientalistas por permitir la depredación de los recursos naturales en la Argentina.

En diálogo con diario Hoy, la referente de la Asamblea Sanjuanina Contra la Contaminación y el Saqueo, Débora Gómez, destacó que “este nuevo incidente demuestra lo que desde hace años nosotros venimos manifestando casi en soledad: la total y absoluta complicidad de las autoridades sanjuaninas y nacionales con el accionar delictivo de la empresa canadiense en nuestro país”.

Para la dirigente ambientalista, “el gobierno provincial, con José Luis Gioja detrás, trabaja codo a codo con la Barrick Gold, le importa muy poco la integridad física de los ciudadanos. La Policía Minera, la Secretaría de Medio Ambiente, el gobernador, los intendentes, todos trabajan para la minera. Lamentablemente, a nivel nacional no se ha cambiado en nada esta política, y se sigue manteniendo un accionar que termina con los pocos recursos naturales que nos quedan”.

“Lo más triste de todo es que tienen que pasar hechos de tamaña magnitud para que la gente y los diferentes gobiernos comiencen a tomar conciencia del daño ambiental que causan empresas como la Barrick Gold a nuestro ecosistema. Si no tomamos cartas en el asunto, dentro de pocos años vamos a desa­parecer como pueblo”, resaltó Gómez.

Esta complicada situación deja al descubierto la unidad de acción entre distintos poderes económicos y políticos, poniendo en evidencia el desamparo al que se ve sometida esta comunidad, desprovista de toda protección ante el avance casi impune de una empresa que arrasa con todo lo que se le interpone a su paso.

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