Oscuro negocio: con el torneo largo se vienen las apuestas deportivas

La posibilidad de que haya un campeonato de más de 30 equipos sería el plafón para poner en marcha el Prode Bancado. Sospechas por posibles casos de corrupción y lavado de dinero

En casi todos los cambios que decide llevar adelante la Asociación del Fútbol Argentina (AFA), entidad que preside desde el año 1979 el controvertido Julio Humberto Grondona, y que es socia del gobierno K en el denominado “Fútbol para todos”, se esconde un negocio turbio.

La puesta en marcha de un torneo largo, en el que podría intervenir hasta 36 equipos, no sería la excepción. Sería la pantalla para legalizar las apuestas deportivas, una actividad que mueve cifras multimillonarias y que, en distintas partes del mundo, ha generado grandes escándalos al conocerse que hubo partidos –y deportistas- “arreglados” por la red de apostadores. 

Los casos son numerosos. Por ejemplo, en Italia, a modo de castigo, luego de descubrirse que el resultado de 19 partidos fue alterado de manera delictiva por intereses relacionados con apostadores, en 2006 la Justicia castigó con  el descenso  al club Juventus, y le quitó dos títulos conseguidos en la máxima categoría del fútbol italiano. Además de Juventus, también fueron sancionados Fiorentina, Lazio y Roma. Un caso de características similares ocurrió en 1980, y en aquel entonces el equipo que fue obligado a descender fue el Milán, otro de los grandes del Calcio. 

Si las apuestas deportivas generaron semejante escándalo en Europa, ¿qué puede llegar a ocurrir en la Argentina donde la corrupción es mucho mayor y la ausencia de controles es total? Es muy probable que la máxima pasión deportiva de nuestro país se tiña, definitivamente, de color oscuro. 

Uno de los que estaría detrás del negocio sería Cristóbal López, dueño de la firma Casino Club. Se trata de un empresario cuyo patrimonio creció exponencialmente durante la mal llamada “década ganada”, gracias a que tanto Néstor como Cristina Kirchner le permitieron inundar de tragamonedas y casinos varias provincias argentinas. 

De hecho, poco antes de dejar el cargo de Presidente, Néstor Kirchner firmó un decreto mediante el cual le prorrogó a López el contrato para explotación de las tragamonedas en el Hipódromo de Palermo hasta el año 2032, y le habilitó acrecentar el parque de maquinitas en ese centro hípico desde 3.100 a 5.000 unidades. "Grondona dijo que se buscará el financiamiento a través de la gestión del Prode Bancado, el fútbol tiene expectativa en poder generar más recursos a través de las apuestas deportivas", reconoció un importe dirigente, muy cercano al titular de la AFA.  

El 20 de octubre de 2012, el diario Hoy anticipó, con numerosos detalles, en qué consiste la ofensiva de Grondona para habilitar este negocio. Se trata, básicamente, de transformar el viejo juego del Prode, que está prácticamente en desuso, en el denominado Prode Bancado, utilizando para ello las nuevas tecnologías para que se pueda apostar por internet. Posibilitaría, por ejemplo, apostar no sólo el resultado de un partido, sino también todo tipo de detalles desde el jugador que más tiros libres patea en determinado encuentro hasta quien comete la mayor cantidad de infracciones.

Al haber mayor cantidad de equipos en la máxima categoría, se ampliará notablemente el universo de apuestas, siendo el caldo de cultivo para posibles operaciones de lavado de dinero y para que las instituciones del fútbol, que algún momento eran entidades sociales sin fines de lucro, pasen a funcionar solamente como meras unidades de negocios. 

Protagonistas del negocio

Hace por lo menos siete años que Cristóbal López viene operando, desde la sombras, para quedarse con el negocio de las apuestas deportivas. En 2007 adquirió la firma TecnoAction, una empresa de  servicios patagónica que desde 1991 se encarga de la administración automatizada de apuestas, la gestión de redes de transporte y el control de estacionamiento en la vía pública.

La sociedad TecnoAction está conformada por INTRALOT S.A, una empresa griega dedicada a la automatización de apuestas de loterías y deportivas, el Hipódromo Argentino de Palermo SA y Casino Club. En tanto, el grupo Codere, principal operador del negocio del juego en la Provincia, con la administración de 14 salas de bingo con tragamonedas, es propietaria de Victoria, que en Europa se dedica a las apuestas deportivas.

Otro posible protagonista es la empresa austriaca Bwin, que entre 2005 y 2006 fue patrocinadora de la camiseta de Boca durante una gira que hizo el equipo xeneize por Israel y México. El club y Bwin llegaron a firmar un acuerdo publicitario por 13 millones de dólares, cuando Daniel Angelici (presidente de Boca) era el tesorero de la institución, pero no pudo continuar ante las dificultades legales que tuvo la compañía europea para operar en nuestro país.  

Reclaman regulación

En diálogo con Hoy, el exdiputado Walter Martello, autor del libro “No va más”, que reconstruye el negocio del juego en la provincia de Buenos Aires en las últimas dos décadas, afirmó que “teniendo seis meses de plazo hasta la iniciación del próximo torneo es el momento de establecer una regulación que genere transparencia, controles exhaustivos tanto fiscales como deportivos, y las provincias no deben estar ausentes. Esperamos que esa regulación también permita que no haya monopolios, que participen todos los operadores habilitados tal cual sucede en España y que la distribución de las utilidades no sólo llegue a los clubes sino a las provincias, que curiosamente aparecen ajenas a esta modalidad cuando entre otras cosas deben brindar la seguridad en los estadios”.

Finalmente, Martello concluyó: “Así como están dadas las cosas, si sólo sirve para seguir volcando recursos a los clubes que nunca tienen sanción y que gozan de impunidad en sus acciones solo será una modalidad de apuestas sin ningún fin social y de dudoso éxito".