Inundaciones
Scioli se diferencia del kirchnerismo y dialoga con el campo
El gobernador bonaerense se reunió con representantes de la Mesa de Enlace provincial, ante quienes presentó un paquete de beneficios impositivos y financieros para los más de 60 distritos declarados en emergencia hídrica
Tras tanta inclemencia climática y tanta indiferencia oficial, ayer los productores rurales de los más de 60 distritos bonaerenses declarados en emergencia hídrica, sintieron una bocanada de aire fresco.
Porque, diferenciándose del gobierno nacional, que sistemáticamente desoye los reclamos del sector, el gobernador Daniel Scioli se reunió en sus oficinas de la ciudad de Buenos Aires con representantes de Coninagro, Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap), la Sociedad Rural Argentina (SRA) y la Federación Agraria Argentina (FAA), ante quienes firmó el decreto de emergencia y desastre agropecuario.
Según coincidieron los dirigentes de la Mesa de Enlace bonaerense, esto traerá “alivio” ante la problemática que dejaron las inundaciones y por las que el campo, que ya trabajaba a pérdida, perdió $1000 millones.
Rodeado de gran parte de su gabinete (los ministros de Asuntos Agrarios, Alejandro Rodríguez; de Economía, Silvina Batakis; de Seguridad, Alejandro Granados; y de Infraestructura, Alejandro Arlía, y por el presidente del BAPRO, Gustavo Marangoni), el candidato presidencial por el Frente para la Victoria presentó un paquete de medidas impositivas (ARBA) y financieras (Banco Provincia) para atender la situación de los campos inundados; el mismo será presentado “en forma urgente” ante la Comisión de Emergencia Agropecuaria nacional para su tratamiento.
La importancia del agro
Durante la reunión, Scioli ponderó “la importancia” del “diálogo institucional con los pequeños y medianos productores del campo”, y agregó que “el desarrollo agroalimentario es una prioridad estratégica para la Argentina”.
Por su parte, el director ejecutivo de CARBAP, Alfredo Rodes, destacó que “se obtuvieron algunas respuestas y beneficios que se requieren ante la emergencia. Esperamos que esta declaración se convalide rápidamente en el orden nacional”. Además de Rodes, también estuvieron presentes Horacio Salaverri por CARBAP; Daniel Berdini y Carlos Bories (CONINAGRO; Julio Currás y Jorge Solmi (FAA); Abel Guerrieri y Santos Zuberbuhler (SRA).
Entre otras iniciativas presentadas al ruralismo bonaerense, también se anunció la prórroga de vencimientos de la cartera agropecuaria y créditos especiales para la recomposición de forrajes y capital de trabajo por parte del Banco Provincia; la extensión del plazo de vigencia de las guías de traslado de ganado en pie, pasando de 72 horas hábiles a 8 días hábiles; el refuerzo del Plan Ganadero Provincial en materia de sanidad e incorporación de equipamiento; y financiamiento especial por parte del Consejo Federal de Inversiones (CFI).
Un mensaje al kirchnerismo duro
Esta apertura al diálogo de Scioli, tendiendo puentes con el campo (ese enemigo insólito del kirchnerismo, motor de un país que supo ser granero del mundo y que hoy ni siquiera es recibido por las autoridades nacionales), fue, claro, un mensaje directo para los productores (que, en la situación terminal del sector, ya no esperan nada de Cristina Kirchner), una advertencia de que el autoritarismo K culmina el 10 de diciembre y que el diálogo es una posibilidad. Pero elípticamente, también fue una cachetada al kirchnerismo más duro, que ningunea a la Mesa de Enlace, excepto, al presidente de la FAA, Omar Prícipe, cercano al oficialismo. Porque en el gobierno nacional hay hijos y entenados. Ojalá, el calor de diciembre marchite esa política.
