Se fue Milani: ¿habrá juicio y castigo?
El Jefe del Ejército, servil al kirchnerismo, pidió el pase a retiro. Dijo que por razones personales. La verdad es que cercado por varias causas judiciales es un estorbo en la compleja campaña que se avecina. La oposición y familiares de las víctimas en alerta
Acorralado por varias causas penales en la justicia federal por desaparición, secuestro y torturas durante la dictadura, y por enriquecimiento ilícito, el jefe del Ejército argentino, César Milani, pidió ayer el pase a retiro “por razones personales”, por lo que familiares de las víctimas y líderes políticos de la oposición, alertados, salieron reclamar que se continúe con las investigaciones judiciales.
Milani había sido ascendido en forma extraordinaria por la presidenta Cristina Kirchner, hasta llegar a ser el titular del Ejército argentino. Su especialidad en los servicios de inteligencias fue de suma utilidad para los K. El castrense se ocupó de investigar a políticos y periodistas opositores violando todas las garantías de seguridad nacional, con el aval del gobierno nacional.
Aliado a la inefable Hebe de Bonafini, Milani consiguió extender su dominio en forma exponencial. El valor que le dio el kirchnerismo a los servicios de inteligencia en el Ejército se ve claramente con estos datos: desde el 25 de mayo del 2003 a la fecha, los gastos en esa área se multiplicaron hasta aumentar en un 956%. El Ministerio de Defensa pasó de manejar 68 millones a 837 en la mal llamada década ganada (1122%) casi el triple de la ex SIDE que pasó de 138 millones a 801. El cambio abrupto en el destino de los fondos se dio tras la muerte de Néstor Kirchner.
Pero en el año 2012, comenzó el quiebre dentro de los servicios de inteligencia. El asesinato del “Lauchón” Viale fue su consecuencia. Mientras tanto, el Estado Mayor General del Ejército aumentó un 4113% entre 2003 y 2015. En cambio, la Armada -819%-, Fuerza Aérea -558%- y el resto de los organismos sólo el 58,6%. En este sentido, Milani fue el gran ganador de estos tiempos. Hasta ayer.
En la mira de la justicia
Milani es investigado por la Justicia tucumana por su supuesta vinculación con la desaparición del soldado riojano Alberto Ledo, ocurrida en 1976 en esa provincia.
A fines del año pasado Milani fue imputado por el fiscal federal Carlos Brito, que pidió su indagatoria por los delitos de encubrimiento y falsedad ideológica de documentos públicos.
En 1976 Ledo era estudiante universitario de Historia y le tocó realizar el servicio militar obligatorio en el Batallón de Ingenieros en Construcciones 141 de La Rioja, donde Milani estaba destinado como joven oficial.
En junio fueron trasladados a la provincia de Tucumán, donde desde 1975 el Ejército desplegaba el denominado "Operativo Independencia de aniquilación a la compañía "Ramón Rosa Jiménez" de la guerrilla rural del trotskysta Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP).
La noche del 17 junio de 1976 Ledo fue obligado a realizar una patrulla junto a otros uniformados y nunca regresó a la base.
En tanto, en la justicia de La Rioja el hasta ayer jefe del Ejército afronta otra causa penal iniciada por una denuncia de Ramón Alfredo Olivera, que lo acusó de secuestros y torturas cuando fue detenido junto a su padre en la casa familiar en la capital riojana en 1977.
Y en Capital Federal el juez Daniel Rafecas sigue adelante con una investigación por presunto enriquecimiento ilícito en contra de Milani, a raíz del crecimiento en su patrimonio, el que habría llegado 400 millones de pesos.
El relevo: un veterano de Malvinas
Como si ya todo estuviera orquestado, el Ministerio de Defensa, Agustín Rossi, comunicó poco después del anuncio del pase a retiro de César Milani que el general de división Ricardo Luis Cundom fue designado por la presidenta Cristina Kirchner como nuevo jefe del Estado Mayor del Ejército Argentino.
Cundom, un hombre de confianza de Milani, es un veterano de la Guerra de Malvinas que se desempañaba como comandante operacional del Estado Mayor Conjunto y ejerció el rol de coordinador de las tres fuerzas en la última Campaña Antártica del Verano.
¿Reemplazará a Oscar Parrilli?
Una versión indicaba anoche que César Milani pidió su pase a retiro como militar porque, como civil, asumiría la jefatura de la recientemente creada Agencia Federal de Inteligencia (AFI), para de esa manera, el hasta ahora jefe del Ejército se haría cargo del área de Inteligencia durante la campaña electoral.
Actualmente, la AFI es conducida por Oscar Parrilli, quien ya tiene destino para después del 10 de diciembre: será suplente en la lista de candidatos a diputados del Parlasur por la provincia de Neuquén.
“Presupuesto monstruoso e inteligencia interna”
“La permanencia del general César Milani al frente del Ejército era insostenible. Se decidió su pase a retiro para hacerle las cosas más fáciles al Gobierno. Milani es el emergente del desgobierno y la degradación de la Defensa Nacional: sospechado fuertemente de haber participado en la represión ilegal de la dictadura, de enriquecimiento ilícito, de transformar al Ejército, que es una institución de la Nación, en una parcialidad politizada y de construir un sistema de inteligencia interior como jamás existió en la democracia, con un presupuesto monstruoso y violando las leyes y garantías. Lo preocupante es que esa estructura queda”.
“No puede ser un pasaporte a la impunidad”
“El retiro del jefe del Ejército, César Milani, no puede ser un pasaporte para la impunidad. En muchas oportunidades denunciamos que su presencia al frente del Ejército era ofensiva para la dignidad del Estado, dado sus antecedentes y algunas de sus acciones durante el ejercicio del cargo.
Senador Fernando Solanas
Esta es una excelente noticia para la democracia. Pero sería perfecta si la Justicia investiga las responsabilidades que le correspondan a Milani por las acciones supuestamente ilícitas que haya cometido”.
Senador Ernesto Sanz