Leopoldo Luque negó haber estado al frente de la internación domiciliaria de Diego

Lamento profundamente el deceso de Diego Armando Maradona. Era mi paciente y mi amigo”, afirmó Luque en su descargo.

El neurocirujano Leopoldo Luciano Luque negó hoy haber estado a cargo de la internación domiciliaria donde falleció Diego Armando Maradona, deslindó responsabilidades en la empresa de medicina prepaga, pidió la realización de una nueva junta médica y aseguró que nunca se representó la posibilidad de la muerte del “10” porque las patologías que presentaba surgieron en la autopsia y no en los chequeos médicos que se hizo en vida.

“Lamento profundamente el deceso de Diego Armando Maradona. Era mi paciente y mi amigo”, afirmó Luque en unas de las primeras frases del descargo por escrito de 85 páginas, al que tuvo acceso Télam y que presentó en la Fiscalía General de San Isidro, donde era indagado desde este mediodía por los fiscales de la causa.

Según trascendió, la estrategia del neurocirujano para tratar de salir "aireoso" de la causa es la negación de todos los cargos presentados, donde a su vez negaría haber sido el médico de cabecera del exfutbolista y deslindará responsabilidades en la empresa de medicina prepaga y sostendrá que la del "10" fue una muerte súbita imposible de prever.

De acuerdo a la información oficial, fue citado para las 12 del mediodía en al Fiscalía General de San Isidro, en calle Acassuso 476, donde estará acompañado por sus abogados, Julio Rivas y Mara Digiuni.

Luque ratificaría la declaración espontánea que presentó por escrito en diciembre del año pasado y luego contestará las preguntas que le formulen los fiscales.

El médico de Maradona enfrenta el delito de "homicidio simple con dolo eventual", que tendría una pena de entre 8 y 25 años de cárcel. 

John Broyad, e integrado por sus adjuntos, Patricio Ferrari y Cosme Iribarren, y por la fiscal de Benavídez, Laura Capra, eligió esa figura penal tras seis meses de investigación, en los que concluyó que los médicos de Maradona no solo fueron deficientes, sino que se representaron la posibilidad de que el "10" podía morirse y no hicieron nada para evitarlo.

Cuando lo citaron a indagatoria, los fiscales expresaron que "Luque, en su carácter de médico de cabecera, violando las reglas del buen arte de curar a las que en definitiva despreció porque tenía pleno conocimiento de la sintomatología presentada por el paciente en el último período, evitó asistir y/o al menos propiciar la debida atención médica a Diego Armando Maradona".

"No garantizó su debido seguimiento con controles y estudios cardiológicos, ni convocó especialistas en materia cardiovascular, hepática y renal, conforme su cuadro requería, librando su destino a su suerte", dicen los fiscales.

A su vez, dijeron que: "en forma sistemática, ignoró y menospreció los síntomas y signos compatibles con la insuficiencia cardíaca que le eran informados por personas ajenas al equipo médico y que personalmente tuvo la oportunidad de evaluar".

Por último, destacan que Luque "no confeccionó una historia clínica de la víctima ni asentó los datos relevantes de diagnóstico, terapia y enfermedad del paciente". Los argumentos de la defensa de Luque ya están expuestos en la causa en la declaración espontánea que presentó el 18 de diciembre último.