La Pampa

16 años para camionero que abusó de tres niñas

Con todas mantenía vínculos de parentesco o de amistad con sus padres.

La justicia pampeana confirmó hoy la pena de 16 años de prisión contra un camionero por abusar sexualmente de tres menores, con quienes mantenía vínculos de parentesco o de amistad con sus padres y tenía en guarda a las víctimas.

Prensa del Poder Judicial informó que la resolución de la Sala A del Tribunal de Impugnación Penal (TIP), conformada por los jueces Pablo Balaguer y Mauricio Piombi, ratificó de manera general la sentencia dictada por el juez de audiencia de General Pico, Marcelo Pagano.

En la sentencia incluyó una modificación a la calificación legal de los delitos ya que, al aceptar el recurso de impugnación de la fiscala Ana Laura Ruffini, consideró que el acusado los cometió cuando tenía la guarda de las víctimas.

Así, el imputado fue condenado por ser autor de los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante agravado por la guarda.

Son tres hechos, en concurso real, en perjuicio de una niña de cinco años; abuso sexual simple agravado por la situación de guarda en otro hecho contra otra niña; y abuso sexual gravemente ultrajante, agravado por la guarda, como delito continuado, en perjuicio de otra menor.

El juez había dado por probado que a principios de 2011 el acusado abusó en tres ocasiones de la más chica de las niñas, que es la nieta de su hermano.

Las otras agresiones ocurrieron entre 2010 y 2014 en el predio rural donde trabajaba el acusado.

Además el TIP sostuvo que "el juez no hizo más que cumplir en su valoración con las exigencias que el ordenamiento jurídico le requiere" y concluyó que "ante el agravio por la errónea valoración de la prueba tampoco le asiste la razón al recurrente y por ello, no debe hacerse lugar al planteo por existencia de duda razonable y aplicación del precepto in dubio pro reo" (la duda beneficia al reo)".

La causa se abrió en enero del año pasado, a pesar del tiempo transcurrido desde los abusos, a raíz de la denuncia formulada por la madre de una de las víctimas cuando ella le pudo contar los sufrimientos que había padecido. ​