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Berisso: fiesta clandestina, borrachera y batalla campal con la Policía

Ocurrió en la zona de 11 y 147, cuando los presentes se resistieron al arresto y atacaron a los uniformados luego de que les pidieran que bajaran el volumen de la música

Un grupo de vecinos de la localidad de Berisso incumplieron con el aislamiento social, preventivo y obligatorio que rige en el país, y decidieron organizar una fiesta clandestina en una vivienda ubicada en la zona de 11 y 147.


Alcohol, música a todo volumen hasta altas horas de la madrugada, y un numeroso grupo de personas fue la postal que provocó que otros frentistas dieran aviso a las autoridades sobre lo sucedido. Tras un llamado al 911 denunciando el hecho, un móvil del Comando de Patrullas se dirigió hasta la mencionada dirección y constató la situación.


Eran las cinco de la mañana y la música continuaba, por lo que ante todo los uniformados les pidieron a los presentes que bajaran el volumen, a lo que accedieron de inmediato. Luego, los efectivos procedieron a notificarles que estaban incumpliendo con la cuarentena, por lo que se los iba a imputar por cargos federales por “infracción del Artículo 205 del Código Penal”.


No obstante, cuando parecía que todo iba a resolverse de forma tranquila y sin violencia, dos de los presentes comenzaron a ponerse hostiles con los oficiales. Lo que primero comenzó con insultos, pasó rápidamente a la agresión física, cuando uno de los individuos se abalanzó sobre uno de los agentes.


Con golpes de puños y patadas, ambos sujetos atacaron a los uniformados, quienes comenzaron a defenderse. Tras el enfrentamiento, los oficiales lograron reducir a los dos masculinos, pero eso no impidió que continuaran violentándose, y de una patada, uno de ellos rompió una de las puertas del patrullero cuando intentaban ingresarlo al mismo.


Los dos implicados fueron llevados hasta la dependencia de la comisaría Primera de Berisso, con jurisdicción en la zona, donde se los imputó los por el delito de “daño calificado” y por romper el aislamiento obligatorio. Cabe mencionar que los aprehendidos, identificados como dos hombres de 26 y 35 años, estaban en completo estado de ebriedad al momento de su detención.


Por su parte, los agentes que fueron atacados recibieron la correspondiente atención médica y se constató que no habían sufrido heridas que comprometieran su estado de salud, por lo que fueron dados de alta a la brevedad.