Boqueteros cavan durante 5 meses y le erran al objetivo
Una banda de boqueteros, que podría calificarse por lo menos de desorientada, cavó un túnel durante cinco meses para robar el tesoro de un banco en el barrio porteño de Floresta, pero finalmente llegó a una mueblería vecina y se alzó con tres mil pesos como “botín consuelo”.
Fuentes policiales informaron que el boquete, por el cual los ladrones querían entrar originalmente a una sucursal del Banco Piano, fue descubierto cerca de las 9 del pasado sábado en el comercio “El mundo del mueble”, en Rivadavia al 8700, entre Carrasco y Belén. Al abrir el local, el encargado del negocio halló el salón de ventas revuelto, la caja registradora abierta y la falta de unos tres mil pesos que había del día anterior.
Luego, al limpiar el lugar, los empleados de la mueblería corrieron una de las cunas que estaban en exhibición para la venta y descubrieron en el piso un agujero de casi medio metro de ancho por uno de profundidad, con lo cual confirmaron que los ladrones habían ingresado por allí.
Policías descubrieron que se trataba de la boca de un túnel que los boqueteros habían realizado con un pico neumático, palas, herramientas hidráulicas y con la ayuda de tubos de oxígeno que dejaron abandonados en el negocio. El túnel fue cavado desde un deposito que los maleantes habían alquilado hace cinco meses y descubrieron un plano, donde los boqueteros habían planificado que el destino del túnel fuera el tesoro de una sucursal del Banco Piano, situada a 30 metros de la mueblería y en la misma cuadra.