Ladrones en Parque Castelli: “Che, pibes, levántense que esto es un robo”

Cuatro delincuentes asaltaron la casa del jefe de seguridad del Hospital San Juan de Dios, a quien sometieron junto con su mujer y sus dos hijos menores

Cuatro delincuentes cometieron un violento robo en inmediaciones del Parque Castelli, donde sorprendieron a una familia a la que golpearon y amenazaron, para luego escapar con dinero, elementos de valor y hasta un arma de fuego, explicaron ayer fuentes policiales. 

Todo se inició pasada la medianoche del lunes en un inmueble de 26 entre 69 y 70, cuando el dueño del lugar, Carlos Alberto (53), jefe de seguridad del Hospital San Juan de Dios, llegó en su auto y, al momento de guardarlo, fue abordado por tres de los ladrones, mientras que un cuarto delincuente se quedó a bordo de un vehículo. “Lo hicieron ingresar a la fuerza, golpeándolo con un arma de fuego”, explicó un vocero. 

Una vez dentro del lugar, los hampones fueron a una de las habitaciones, donde dormían dos chicos de 7 y 15 años, a quienes les dijeron: “Che, pibes, levántense que esto es un robo”. Los llevaron con su padre, su madre y una empleada de 38 años, para luego comenzar a recorrer las instalaciones. 

Dinero y un revólver 

De esta manera se apoderaron de una suma en efectivo que no trascendió, tres celulares, dos televisores, una Playstation 3, una computadora, un DVD, un revólver calibre .32 con su documentación, anillos, cadenitas y otros papeles. Para guardar parte del botín, los hampones “vaciaron la mochila de uno de los nenes y metieron las cosas ahí”, le contó a este medio Carlos Alberto, quien también aseguró que los malvivientes, que tenían “entre 17 y 20 años, y estaban tranquilos”, se apoderaron de un bolso de su esposa.

A continuación, los cacos dejaron atado al hombre en una silla de la cocina y se llevaron consigo a la mujer, para que les abriera la puerta. Acomodaron todo en el vehículo en el que habían llegado (un Fiat de color blanco o un Volkswagen último modelo, según un jefe de la fuerza) y se fueron. 

Entonces el dueño de casa se dirigió por sus propios medios al San Juan de Dios, donde fue asistido y luego dado de alta, ya que las heridas en su cabeza no revestían gravedad. Desde allí se le avisó a la Policía, por lo que un móvil del Comando de Patrullas La Plata, bajo la conducción de Ricardo Astopini, fue hasta el nosocomio y posteriormente a la vivienda donde se produjo el hecho. 

Más tarde también se aproximaron los peritos de la Policía Científica, pero al cierre de esta edición no se había incautado material de interés para dar con los autores del ilícito, que permanecen prófugos. La comisaría Quinta y la UFI nº 9 de Autores Ignorados investigan la causa, caratulada como “robo calificado y lesiones”.

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