Otra jornada colmada de violencia dejó un menor asesinado en Villa Elvira
Lo lincharon los familiares y amigos de otro joven, de 18 años, que recibió un balazo en la cabeza y agoniza. Además, la novia del fallecido también fue atacada.
Nuevamente la violencia en su grado más extremo dejó en nuestra región una persona muerta, asesinada literalmente a golpes, y otras dos heridas. Una de ellas está luchando por su vida luego de recibir un balazo que le ocasionó inclusive pérdida de masa encefálica. Fuentes policiales informaron ayer que los brutales incidentes, que están relacionados entre sí, tuvieron lugar en un sector de Villa Elvira. La causa, al parecer, fue una disputa de vieja data entre las partes, que terminó de la peor manera.
En orden cronológico, todo se inició alrededor de las 3, cuando un joven de 18 años, llamado Matías Andrés, caminaba al parecer solo, por las calles 1 y 93 de Villa Montoro. Qué hacía a esas horas por allí es un misterio que por estos momentos intentan dilucidar desde la Fuerza.
Lo cierto es que entonces se le acercaron otras dos personas, “supuestamente un hombre y una mujer, de edades parecidas a la suya”, de acuerdo a un vocero, y se le pusieron a la par. “Se trasladaban en una moto marca Rouser de color negra”, especificaron. No está claro si hubo una discusión previa, pero lo cierto es que uno de los individuos que circulaba en el ciclomotor extrajo un arma de fuego, apuntó a la otra parte y le disparó en la cabeza, para huir a continuación con su cómplice con rumbo indefinido.
Familiares del herido escucharon la detonación en la cerrada noche y salieron a ver qué había pasado, topándose con la sangrienta escena. Un llamado al 911 alertó a los agentes del destacamento Aeropuerto, que comandados por Gerardo Pérez Palacios llegaron a la escena en cuestión de minutos. Sin embargo, el panorama no era el mejor y fueron recibidos por un numeroso grupo de personas a los gritos e insultos, que luego derivaron en un ataque a pedradas, impidiendo el correcto desempeño laboral. La víctima, en tanto, ya había sido trasladada por sus allegados en un vehículo propio hasta el policlínico San Martín.
Allí, los médicos determinaron que tenía un orificio de entrada en el parietal izquierdo y pérdida de masa encefálica, por lo que quedó internado. Si bien trascendió durante la mañana de ayer que había fallecido, jefes policiales lo desmintieron, aunque aclararon que se encuentra en estado crítico.
Muerto a golpes
Lejos de terminar ahí, la locura criminal continuó, ya que los amigos y familiares de Matías fueron a buscar justicia por mano propia. Así, se acercaron hasta un domicilio de 92 entre 4 y 5 e ingresaron de manera violenta.
Dentro se encontraba un menor de 17 años identificado como Cristian Ezequiel Cepeda, su novia de 18 y dos niñas. La turba sacó a todos los presentes y, después de apoderarse de algunos objetos de valor, procedieron a quemar la casa.
Sin embargo, no se conformaron con eso y atacaron a trompadas, patadas y palazos a Cristian y a su pareja. Ella culminó con heridas en diversas partes de su cuerpo, por lo que también tuvo que ser derivada al San Martín. Él, en cambio, fue linchado y cayó muerto a pocos metros de su hogar, con una profunda lesión sangrante en la cabeza.
Una frentista de la zona le contó a Trama Urbana : “Murió electrocutado cuando intentaba correr para que no lo asesinen a golpes. A ella la apuñalaron por todos lados”, aunque no está determinada todavía la causal del deceso del menor. La misma vecina agregó: “A las dos nenas también casi las matan”.
Con el domicilio incendiándose, fue necesaria la intervención de una dotación de bomberos del cuartel de Villa Elvira, que sofocaron las llamas.
Minutos después, peritos de la Policía Científica y detectives del Gabinete de Homicidios se apersonaron a la escena del crimen para recabar información y determinar fehacientemente los motivos del hecho.
“Se trató de una pelea barrial entre dos personas que se tenían bronca desde hacía un largo tiempo”, resumió una fuente consultada por diario Hoy.
Por el momento, la causa fue caratulada como homicidio, lesiones y otros estragos” por el segundo de los incidentes, y “tentativa de homicidio agravado por el empleo de arma de fuego”, por el primero.