Un subcomisario de la Policía Federal mató a balazos a dos jóvenes, uno de ellos menor de edad, que habrían intentado asaltarlo con la modalidad conocida como "motochorros":
El violento episodio, por el cual el jefe policial fue detenido, se registró el domingo alrededor de las 18:30 en la calle Boulevard de los Italianos al 1.100, de esa zona del sur del Gran Buenos Aires.
El oficial, que tiene 49 años y se desempeña subjefe de la División Auxiliares de Seguridad y Defensa de la fuerza, se encontraba en situación de franco y vestido con ropas de civil.
En ese momento, según declaró a colegas de la Policía provincial, dos jóvenes que se movilizaban en una moto Honda XR 250, se le acercaron y lo amenazaron con un arma de fuego, con claros fines de robo.
Según contó el efectivo policial, sacó de entre sus ropas una pistola de calibre 9 milímetros y efectuó varios disparos contra los asaltantes.
Los dos jóvenes cayeron gravemente heridos y fueron trasladados de urgencia al Hospital Presidente Perón de Avellaneda, donde uno de ellos murió al anochecer del domingo.
En tanto, el segundo sujeto, un adolescente de 17 años que había recibido un impacto de bala en la cabeza, fue operado y su deceso se produjo en horas de la mañana de este lunes.
En el caso tomó intervención la fiscal Natalia Miliore, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 3 de Avellaneda, que depende del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, quien ordenó la detención del subcomisario.
Según se supo, la fiscal intenta aclarar si el oficial actuó en legítima defensa y además ordenó una pericia sobre la pistola empleada en los disparos, la cual no es su arma reglamentaria.
Además, la instructora aguardaba imágenes de las cámaras de seguridad y el resultado de las pericias iniciadas en el lugar del hecho.
"No sabía que robaba"
El padre del adolescente de 17 años aseguró hoy que si bien “controlaba” a su hijo y le revisaba su habitación para saber si estaba en "cosas raras", “no sabía que robaba” y “sospecha de la gente con la que se juntaba”.
Gerónimo Córdova, padre de Alexander Javier (17), dijo a Télam que se enteró de la muerte de su hijo por un comisario.
“Lo llamé a mi hijo para saber dónde estaba porque no me respondía los mensajes y me atendió un comisario que me dijo que le habían pegado dos tiros”, sostuvo.
El hombre afirmó que no sabía que su hijo era delincuente aunque reconoció que sospecha de los jóvenes con quienes se juntaba.
“Me enteré todo ayer, no sabía que robaba. Él arreglaba motos, iba a la escuela, lo controlaba a ver dónde estaba. Desde hace un tiempo sospechaba que tenía mala juntas”, afirmó.
El padre indicó que le revisaba la habitación al adolescente y que nunca halló un arma entre sus pertenencias.
Además, señaló que “nunca le enseñó” a su hijo a robar y que “por mala suerte tomó esa decisión”.
“Mi familia es trabajadora, salimos a cortar pasto con él (por Alexander) y su hermano. Pasó lo que no tenía que pasar”, remarcó.