El karate platense, en lo más alto del mundo

Tras una gran actuación en el Mundial de la modalidad tradicional, los representantes de la ciudad visitaron diario Hoy y mostraron los premios que obtuvieron en San Juan  

Soberbia y brillante performance tuvieron los platenses que, junto con la delegación argentina, compitieron en el segundo Campeonato Mundial de Karate desarrollado entre el 18 y 20 de noviembre en la ciudad de San Juan. Allí también participaron representantes de Australia, Filipinas, Colombia, Perú, Chile, Uruguay, Ecuador y México y, tras grandes actuaciones, Argentina culminó primero a nivel país en Karate tradicional, seguido por Chile, próximo anfitrión del Mundial.

La delegación nacional estuvo compuesta por 70 representantes de todo el país, entre ellos los nacidos en nuestra ciudad, que visitaron la redacción de este medio para contar sus sensaciones tras haber dejado al karate nacional en lo más alto. Así, Leonardo Fernández, director de la escuela Fernandez Riu de La Plata, junto con Adrián Martínez, Elsa Poutou y María Inés Moscol explicaron su experiencia.

—¿Cómo viven este momento?

LF:—Como maestro y fundador de la escuela, estoy muy orgulloso de lo que mis alumnos lograron, representando a la ciudad y a nuestro país. Fue una experiencia inolvidable. Estábamos convencidos de que íbamos a poder hacer todo lo que practicamos durante el año. 

Hubo más de 350 participantes de un nivel impresionante, nosotros tuvimos la suerte de ser parte de la delegación nacional, integrada por alrededor de 70 personas.

—¿Qué es lo que se enseña en su escuela?

LF:—Nosotros pregonamos el Karate Ju Jitsu Fernández Riu, que significa la fusión de artes marciales, como es el Ju Jitsu japonés, en el cual se incorporan tanto movimientos como técnicas de karate y judo. 

Nosotros tenemos la sede central que está en 20 entre 45 y 46, ahí estamos lunes, miércoles y viernes. Tenemos gente de toda las edades, la idea es que uno venga y practique lo que más le guste.

—¿Qué les dejó esta experiencia?

EP:— Fue la mejor de todas, un momento inolvidable. Afortunadamente pudimos traer muchos podios, que era algo que nos propusimos desde un inicio. Tuve la mala suerte de lesionarme el primer día, en una exhibición: rotura de ligamentos. Sin saber que estaba así, dolorida y demás, competimos. Estamos orgullosos por estos logros y se lo dedicamos a todos los que nos acompañaron en este recorrido.