Obispo propone que políticos se realicen rinoscopias para probar que no utilizan drogas
El obispo de Neuquén y vicepresidente primero del Episcopado, Virginio Bressanelli, dijo que "no estaría mal" que los funcionarios públicos se realicen una rinoscopia, para asegurar que no sean adictos a estupefacientes.
El prelado se refirió en estos términos a la propuesta del intendente neuquino Horacio Quiroga de incorporar las rinoscopias para los funcionarios de los tres poderes del Estado.
"Creo que no estaría mal porque es una forma de que primero de todo el funcionario sea sano, asegurar eso no estaría mal, porque sabemos que lamentablemente la droga a entrado en todos los estamentos de la sociedad", sostuvo Bressanelli según el diario Río Negro.
"Entonces cuidar la salud de la sociedad es importante", agregó. Bressanelli reconoció que le resultó novedoso cuando el gobernador de Chubut, Martín Buzzi, se sometió por primera vez a ese estudio.
El jefe comunal anunció el miércoles que está "analizando la posibilidad de garantizar a través de una rinoscopia que los representantes del pueblo no tengan ninguna debilidad de ser adictos a las drogas, en una lucha franca contra el narcotráfico" y opinó que todos los funcionarios del Estado deberían someterse al test.
Bressanelli dijo estar "muy preocupado" por las adicciones entre los jóvenes y advirtió que el país vive una "realidad tremenda y conflictiva" en cuanto al avance del narcotráfico y el consumo de drogas.
"Debemos pensar en políticas nuevas que ayuden a que la juventud y niños sean defendidos de este flagelo. A veces hay leyes pero las leyes quedan en el aire porque no son bajadas a la realidad concreta y a la realidad concreta se las bajan con acciones", subrayó.
"Vamos a tener que encarar las cosas desde el punto de vista educativo, ofrecer algo distinto a la juventud. Hay jóvenes que no ven futuro, no tienen una contención familiar, no tienen una educación suficiente de familia y buscan la felicidad en lo más fácil", agregó. Bressanelli afirmó que este problema "no se resuelve con la criminalización". "El camino debe ser otro, para que el niño y el joven descubra el sentido de su vida y tenga proyección de futuro", recalcó.