Pedido del Defensor del Pueblo, Guido Lorenzino

Reclaman en la Provincia avanzar hacia la implementación de la boleta electrónica

Así lo planteó desde la Defensoría bonaerense su titular, Guido Lorenzino. Advirtió que la Legislatura tiene un año y medio para trabajar en un proyecto para la elección de 2019. “Lo que no podemos hacer es seguir como estamos”, afirmó

El defensor del Pueblo bonaerense, Guido Lorenzino, planteó ayer la necesidad de avanzar hacia un sistema que permita modernizar los escrutinios, para evitar de esa forma las dificultades registradas tanto en el último comicio como en elecciones anteriores.

“Debemos elaborar para 2019 una alternativa para enfrentar las dificultades que se vivieron tanto en las PASO como en otras votaciones, para evitar la intencionalidad, la arbitrariedad y la discrecionalidad relacionada con la carga de datos”, sostuvo Lorenzino.

En ese sentido, el ombudsman bonaerense planteó que “la boleta electrónica es una alternativa válida para ir hacia un sistema electoral que esté a la altura de las demandas actuales, para que la gente tenga certezas a la hora de votar y que también haya certeza cuando se carguen los datos”.

En esa línea, Lorenzino mencionó como posibles modelos los que fueron implementados en la Ciudad de Buenos Aires o en Salta. “Habría que ver cuál es el mejor modelo. Yo no soy un experto en cuestiones electorales, pero pienso que lo que no podemos hacer es seguir como estamos”, aseguró a este medio. “Creo que la única manera de resolver el tema del escrutinio es tener algún tipo de mecanismo online que evite cualquier intencionalidad de las personas en la carga de datos. No hay que seguir votando solamente con el papel, porque a todos nos genera bronca y confusión”, expuso

Asimismo, agregó: “Si bien no creo que se hayan producido adulteraciones en el voto, esta herramienta apunta a que los ciudadanos no se sientan afectados y que los cómputos finales se conozcan en horarios razonables”. “Los resultados deberían aparecer al instante y que después haya algún soporte en papel que verifique cualquier cuestión del sistema”, indicó. 

El debate necesario en la Legislatura

De cara a avanzar en esta propuesta, el defensor del Pueblo informó que en los próximos días se reunirá con el presidente de la Cámara de Diputados provincial, Manuel Mosca, “para plantearle la preocupación por el tema y generar algún espacio para ver cuál es la mejor experiencia que se puede aplicar acá, en la Provincia de Buenos Aires”. En ese marco, reconoció que “se trata de un debate que se debe dar con profundidad entre todas las fuerzas políticas y la ciudadanía, para reconocer las particularidades de nuestro sistema y los desafíos que debemos afrontar”.

“Planteé el tema porque me parece que es oportuno, quedaría un año y medio de acá a la próxima elección para que los legisladores resuelvan este tema, que es recurrente ante cada comicio”, dijo.

Por último, indicó que desde el organismo que conduce se va a “trabajar fuertemente con la Legislatura bonaerense para ver de qué manera ayudamos a sancionar la mejor ley que nos garantice dejar atrás esta cuestión de la carga manual”.

Las fallas del sistema porteño

El 5 de julio de 2015 fue la primera vuelta en las elecciones para definir al jefe de Gobierno porteño. En aquella ocasión se presentó como novedad el sistema de voto a través de la boleta única electrónica (BUE).

Esta opción tuvo serios cuestionamientos por la alta vulnerabilidad del sistema utilizado. Según reveló un informe de la Policía Metropolitana, se cometió un grave ataque informático a los servidores de la empresa Magic Software Argentina (MSA), que estaba a cargo de todo el proceso. El sistema electoral basado en la BUE fue infiltrado y se hicieron modificaciones en el servidor que tenía que recibir los votos a pocas horas de la votación. Se llegaron a crear o eliminar “personas, delegados, técnicos, mesas y establecimientos”.

La propia empresa evidenció la vulnerabilidad de su sistema, pero esperó dos días antes del comicio para denunciarlo. Las pericias posteriores demostraron que los ataques informáticos ocurrieron varios días antes de la fecha que declaró MSA.

Un informe realizado en julio de 2015 por un grupo interdisciplinario de especialistas señaló que MSA no pudo evitar que cualquier persona con un celular pudiera leer el contenido de los chips donde se grababa el voto de la BUE.

En la misma línea se expresó la doctora en Derecho y consultora internacional en temas institucionales y gobierno, Delia Ferreira Rubio, para quien “la boleta única electrónica se puede leer con una aplicación del teléfono” y afirmó que “se demostró también la posibilidad de anotar en el chip de memoria de cada boleta más de un voto”.

En la BUE, “el secreto del voto no está garantizado por el sistema. La patente de MSA dice que los votos se pueden leer sin necesidad de sacarlos de las urnas”, detalló.

Estos argumentos, junto con los de otros expertos en la materia, así como lo expresado por especialistas de la Universidad de Buenos Aires, fueron los que determinaron que senadores del Frente para la Victoria no aprobaran la propuesta que había sido llevada al Congreso por parte del oficialismo en el marco de la Ley de Reforma Electoral.

Una opción distinta: la boleta única

En el camino por buscar una alternativa para lograr mayor transparencia en los comicios y mejorar la celeridad en los tiempos de obtención de los resultados electorales, la diputada provincial Valeria Amendolara presentó en la Cámara baja bonaerense un proyecto de boleta única, siguiendo algunos de los lineamientos que se han llevado a cabo en la provincia de Santa Fe.

Para Amendolara, la boleta única es el modo “más eficaz, transparente, económico y ágil” y “el mejor sistema probado para evitar manipulaciones”.

La iniciativa plantea que, en el caso de las elecciones para gobernador, vicegobernador, intendentes y senadores provinciales, se confeccionará una boleta para cada categoría de cargo eleccionario, la cual contendrá los nombres de los candidatos titulares y suplentes y sus respectivas fotografías.

En el caso de la elección de diputados provinciales y de concejales, se propone que las autoridades electorales correspondientes establezcan qué número de candidatos titulares y suplentes figurarán en la boleta única. 

Además, se aclara que, en todos los casos, las listas completas de candidatos, con sus respectivos suplentes, deberán ser publicadas en afiches o carteles de exhibición obligatoria. 

En el caso de las votaciones simultáneas, el proyecto propone que las boletas únicas deberán ser de un color diferente para cada una de las categorías.

Esta modalidad también permitiría reducir los costos de impresión de boletas que actualmente utiliza cada espacio partidario, ya que las autoridades de mesa entregarían a cada votante una boleta única por cada categoría en disputa y el elector con un bolígrafo marcaría en ella las opciones de su preferencia en el cuarto oscuro.

Por último, en los fundamentos de la propuesta se plantea que lo que se busca es “minimizar, desde la norma, los márgenes de discrecionalidad” y “acrecentar los índices de transparencia, eficiencia y economicidad de los actos eleccionarios”.