El día que Adrián Martínez quiso ser más prócer que Simón Bolívar

Corrían 30 minutos de la primera parte cuando Lionel Messi se disponía a gambetear a Adrián Martínez, un defensor venezolano, que había ingresado hacía pocos instantes por José Velázquez, lesionado. Pocas veces se vio una acción semejante, una patada de tal magnitud al mejor futbolista del mundo, que estuvo tirado en el suelo, atendido por los médicos y que provocó el malestar de sus compañeros.

Adrián González entró con una misión: sacar a Messi de la cancha, sin medir las consecuencias de que su posible lesión lo marcaría de por vida como el hombre malo del fútbol que quebró al mejor de la historia.

“Entró a quebrarlo, es un hijo de p...”, escribió el exárbitro Javier Castrili, quien cuenta con sobrada experiencia en jugadas peligrosas y siempre se caracterizó por penalizar con la tarjeta roja sin miramientos.

Ayer, en cambio, el árbitro del partido lo amonestó, primero, y luego mediante el VAR decidió expulsarlo, una decisión inobjetable.

Pero realmente, ¿quién es este gigante de movimientos lentos y torpes que quiso ser más famoso y mencionado que el mismísimo Simón Bolívar en Venezuela por lesionar a Lionel Messi? El defensor de 28 años juega en el Deportivo La Guaira de su país, es oriundo de San Félix y toda su carrera ha sido allí.

También jugó en clubes menores como Mineros y Metropolitanos. Sin dudas que este momento quedará para siempre en el recuerdo y puso su nombre en los primeros planos, ya que hubo pocas postales brutales contra el capitán del seleccionado argentino como se vieron ayer.

Este año debutó en la Copa Libertadores y con La Guaira le metió un gol a Atlético Mineiro.

Su ficha personal en la web Transfermarkt indica que tuvo seis expulsiones en 80 partidos, lo cual da un índice alto. Una de ellas, en Mineros, fue por una entrada muy violenta. En la temporada 2020/2021 recibió dos rojas por doble amarilla y una por directa, con La Guaira.

Se levantó, pero tiene un fuerte traumatismo

Lionel Messi, fiel a su trayectoria, no quiso salir de la cancha y pidió seguir jugando el encuentro, pese a las marcas en su pierna izquierda luego de intentar gambetear al gigante defensor venezolano.

Todavía sin llegarse a enfriar, el mejor jugador del mundo optó por continuar encaminando la victoria y jugó todo el segundo tiempo. Fue su primer partido completo en casi dos meses, con vacaciones de por medio y una situación estresante como lo que significó su salida del Barcelona.

¡Reviví la jugada!