Braña y la epopeya del último gran campeón
El lunes se cumplirán seis años de la obtención del Apertura 2010 y Rodrigo Braña repasó aquella campaña que le dio al club la estrella número 11. Además, analizó el encuentro de mañana
Rodrigo Braña es el jugador que más títulos conquistó con el club dentro del actual plantel de Estudiantes. Regresó de Quilmes a mitad de año y, a diferencia de Desábato y Andújar, estuvo en las últimas tres conquistas oficiales del club durante la última década. Se consolidó al lado de Verón en el Apertura 2006, fue clave en la conquista de la Copa Libertadores 2009 y resultó un baluarte indiscutible del último campeonato que logró el Pincha, el 12 de diciembre de 2010. Por allí giró la charla en el encuentro exclusivo con este diario, minutos antes de subirse al avión que lo depositó en San Juan, justo en la antesala de otro partido que lo tendrá como titular en la mitad de la cancha.
—Pasan los años, pasan los jugadores, y otra vez como titular en el mediocampo del Pincha…
—Estoy muy contento por este presente. Jugué nueve años de manera ininterrumpida en el club y ahora estoy en un segundo paso que no imaginaba concretar. La verdad es que me siento muy feliz por volver a compartir momentos con la gente que trabaja acá y con los hinchas que te hacen sentir el cariño, más allá de la lesión (pubalgia) que me tiene a mal traer.
—¿Te vas a operar?
—Esperemos que no, porque a esta edad no es conveniente. Espero poder darme el lujo de compartir la última etapa desde lo futbolístico con la gente del club, con la que compartimos muchos momentos lindos en esta institución.
—A horas de un nuevo aniversario del Apertura 2010: ¿qué resaltás del último campeón que tuvo Estudiantes?
—Teníamos un equipo fuerte. En varias partes del torneo jugamos con tres en el fondo y con Mercado y Rojo por las bandas, que a veces jugaban como dos laterales. Y formábamos un buen Catenaccio (risas). Nos fuimos acomodando a jugar sin el Rorro López muchos partidos. Para nosotros era un jugador muy importante. Me acuerdo que Vélez era nuestro perseguidor y cuando nosotros ganábamos 1 a 0 o 2 a 1, ellos metían de a cuatro o cinco…
—Hubo un momento en que se achicó la diferencia: ¿sintieron que iban al desempate?
—Sí. Cuando llevábamos seis puntos de ventaja tuvimos que enfrentar a Vélez de visitante y empatamos cero a cero. Hoy confieso que en la previa nos queríamos sacar de encima ese partido. No queríamos perder para mantener la diferencia de seis puntos. Al final empatamos sin goles. Después tuvimos la esperanza de que Vélez podía dejar algún punto en Mendoza contra Godoy Cruz, pero no. Ganaba y ganaba…
—¿Pensás que aquel equipo supo aprender de la lección que tuvo en el Clausura de ese año, cuando estuvo primero hasta las últimas fechas y terminó siendo campeón Argentinos?
—Y… creo que el equipo del primer semestre del 2010 fue el mejor de todos. Con Sosa, Enzo Pérez, Boselli, la Gata, Clemente Rodríguez… todos juntos. Pero en la anteúltima fecha empatamos cero a cero con Central y no nos alcanzó.
—¿Te hablás con Sabella?
—Por el percance de salud que tuvo, el cual todos conocemos, lo dejamos tranquilo. Soy un agradecido a ese cuerpo técnico porque cuando se fueron de acá nos siguieron convocando junto al Chavo para la Selección. Alejandro es un tipo fuera de serie. Claudio y Julián, lo mismo. Y el profe (Blanco) ni hablar. Ellos congeniaron un gran cuerpo técnico y el cariño va a perdurar por siempre.
—¿Pensás más allá de junio en Estudiantes?
—No sé qué va a pasar. Estoy tratando de disfrutar este momento y de poder aportar desde el lugar que me toca. Quiero ponerme bien y llegar mejor a la pretemporada. Quiero jugar como lo vengo haciendo. Estoy contento porque el técnico me tuvo en cuenta. Mi preocupación cuando volví al club era poder colaborar y jugar. Hoy no estoy pensando después de junio. En su momento se evaluará si sirvió lo que aporté, y si no va más… no va más.