“Con Estudiantes sueño muchas cosas”

Matías Ruiz Díaz recibió a este medio en su casa del barrio Savoia de City Bell. Junto a su familia, contó qué técnicos lo marcaron y qué sintió tras su bautismo en la Primera del Pincha

¿Buscan a Matías? Vive allá”. Así recibió una vecina de Matías Ruiz Díaz a este medio, haciendo de guía hasta la casa del protagonista. En el barrio Savoia de City Bell, precisamente en 5 y 476, “Mati”, como llaman cariñosamente al lateral derecho de Estudiantes que debutó ante Talleres, es uno más. 

Cada uno que lo cruza por las calles lo saluda y conoce desde muy chico. Allí, el futbolista de 21 años (los cumplió el 9 de septiembre, nacido en 1996) recibió a diario Hoy junto a su tíos Walter y Verónica; su papá y hermano, ambos llamados Fernando, y su madre Patricia, quien lo acompaña a todos lados y guarda una colección de cuadros de su hijo. 

“Pasen”, manifestó de forma amena Matías, quien abrió las puertas de su hogar. Su casa es lindera a campos donde él, de chico, se la pasaba jugando a la pelota todo el día. Allí vive junto a sus progenitores. 

Ruiz Díaz habló de sus sensaciones en la previa, durante y tras el partido ante la T. Además, dejó en claro cuál es su próximo sueño.

—¿Qué te dijeron luego del partido en tu casa?

—Cuando llegué, mi mamá y mi novia me estaban esperando. Mi papá se acostó a dormir porque hoy (por ayer) trabajaba, pero me dijeron que lo vivió con muchos nervios (risas). Recién después de entrenar pude hablar tranquilo con mi mamá. La familia también estuvo nerviosa con el encuentro pero se dio todo bastante bien, sobre todo porque ganamos.

—¿Cómo te enteraste de que ibas a ser titular?

—El sábado, cuando se supo que Dubarbier no iba a jugar, Lucas (Bernardi) me indicó que me  utilizaría por el carril izquierdo y me dijo que lo podía hacer bien porque había probado ahí y le gustó. Por suerte, me pude desenvolver bien, aunque tuve muchas dudas.

—¿Ahora cuál es tu sueño?

—Con Estudiantes sueño muchas cosas, anhelo jugar la Copa y disputar muchos partidos más.  ¿Cómo no soñar eso? Si amo a este club. Ojalá pueda disputar la Libertadores y un clásico, pero para eso necesito trabajar y ser constante.

—¿Qué técnicos te aportaron más en las divisiones inferiores?

—Cada uno de los técnicos de Inferiores me marcó, todos me aportaron algo, desde que llegué al club hasta Lucas Nardi, que fue el último que tuve en Reserva. Pude sacarle provecho a cada entrenador: Juani Brown, Desio, Saggese, Perotti, Mazzucco. No quiero olvidarme de nadie porque de todos aprendí muchas cosas que hoy valoro y me sirvieron.

Matías Ruiz Díaz y una vida detrás de la pelota

El joven defensor comenzó jugando en cancha de 7 con edad de Infantiles en el club Fivica (Gonnet), el cual compite en APLAFI; luego pasó al Club Atlético Deportivo City Bell, la institución de su barrio, la cual le quedaba más cerca de su casa.

Sin embargo, lo particular sucedió cuando debía comenzar a jugar en cancha de 11: Matías dejó ese fútbol para competir en torneos aficionados, por plata, barriales. 

Más de grande quedó en una prueba en el Pincha y desde allí erigió una carrera que tuvo el bautismo en Primera división el pasado domingo.

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