Estudiantes derrotó a Newell's y llega de racha al clásico

Noche húmeda de febrero. Mosquitos que acechaban y una ambición intacta: ganar el clásico después de casi seis años. En ese contexto, Estudiantes se presentó ante Newell’s sin Enzo Pérez ni Mauro Méndez como titulares y le costó mucho ganar de local.

El equipo de Domínguez fue superior a su rival, pero otra vez falló mucho en la definición. Newell’s vino a La Plata a jugar con el cuchillo entre los dientes y rápidamente perdió a una de sus figuras: Ever Banega se fue expulsado de manera infantil pegando una patada en un lateral y condicionó a su equipo, que ya de antemano venía de hacer un gran desgaste viajando a Estados Unidos en las últimas horas.

El conjunto rosarino arrancó mejor, se fue acomodando a las circunstancias que se presentaron en el partido y terminó jugando de contragolpe.

El Pincha, en cambio, se replegó en los primeros minutos, aguantó y se fue agradando a partir de haber quedado con un jugador más.

José Sosa jugó un partido aparte, ya que por momentos pegó de más, se fue de eje y se salvó de que lo terminen expulsando, cuando en realidad debía llevar serenidad en el mejor momento del equipo. Si bien se mostró y pidió siempre la pelota, nunca pudo terminar de generar una situación clara para que los delanteros puedan abrir el partido.

El técnico Domínguez también tuvo decisiones fuertes y extrañas: además de no usar a Enzo Pérez, hizo dos cambios a los 37 minutos del primer tiempo, lo sacó a Zapiola y a Zuqui y metió a Cetré y Méndez cuando faltaban ocho minutos para que termine el primer tiempo.

Con la abundancia de delanteros Estudiantes logró merodear el área de Newell’s, pero los rosarinos se defendieron muy bien y se salvaron, ya que hubo un remate en el travesaño en el amanecer del segundo tiempo que pudo cambiar las cosas.

Estudiantes sintió la ausencia de Pérez, pero Ascacíbar y Sosa se encargaron de atenuar la por momentos ausencia deportiva del chileno Altamirano, quien entra poco en juego y desentona en comparación al resto.

En la parte final a Estudiantes no le faltó ambición. El equipo siguió jugando en campo adversario y la entrada de Thiago Palacios para reemplazar al ya cansado Sosa le dio la frescura necesaria para ganar el partido.

El último refuerzo probó desde afuera y buscó por adentro. Y en uno de los remates con destino al arco de Newell’s, la pelota se desvió en Mauro Méndez y descolocó al arquero Macagno.

Ya en tiempo de descuento, el equipo amplió la diferencia a través de una definición de Mauro Méndez, quien recibió un pase rasante de Cetré desde la derecha.

Esa última jugada del partido anticipó lo que podría ser la dupla de atacantes para el domingo en el Bosque, cuando el Pincha intente ganarle al eterno rival después de mucho tiempo.

De esta manera, Estudiantes estiró el invicto en 2024, sumó tres valiosos puntos, acrecentó el bajón de Newell’s y es escolta de Godoy Cruz en la Zona B de la Copa de la Liga.