historia de vida
Kanté, la estrella francesa que de chico trabajaba recogiendo basura
Con tan sólo siete años, durante el Mundial Francia 1998, ya se ganaba la vida recorriendo las calles parisinas al lado de su padre recogiendo basura. Hoy guió a su país a levantar la segunda Copa del Mundo
N'Golo Kanté, quien es de origen malí, hoy tocó el cielo con las manos: a sus 27 años logró levantar la Copa del Mundo junto a Francia, que ganó su segunda estrella. El mediocampista tiene una conmovedora historia de superación, admirable por donde se lo vea:
Kanté, cuando era un nene de tan sólo 7 años, durante el Mundial Francia 1998, ya se ganaba la vida recorriendo las calles parisinas al lado de su padre recogiendo basura para luego enviarla a una planta de reciclaje. Al poco tiempo, su padre fallecería, significando uno de los golpes más duros de su vida.
El destino lo siguió probando y le hizo más difícil el camino: sus inicios en el fútbol también fueron muy difíciles debido a su baja estatura, por lo que muchos equipos lo rechazaron al fijarse casi exclusivamente en su físico.
Entre sus 13 y 18 años, trató de ingresar a academias profesionales como Rennes, Lorient, Sochaux de Francia, pero no le dieron la oportunidad. Kanté, mayor de cuatro hermanos, nunca bajó los brazos.
El Boulogne y el Caen fueron dos equipos que le dieron lugar, aunque en esos tiempos también coqueteaba con el rugby. “Cuando era joven hice un tackle en un torneo y mi profesor me avisó de que un ojeador se había quedado con mi nombre. Me dijo que tenía buen espíritu y condiciones para ser jugador de rugby”, reveló en una entrevista.
En 2015, Claudio Ranieri se lo llevó al Leicester y luego de una gran temporada con título incluido, el Chelsea se lo compró por 30 millones de euros, en donde ganó otro torneo de liga y la FA Cup Out del Mundial 2014.
Cabe marcar que en ese mismo año, previo a emigrar al Leicester, Mali le ofreció a Kante jugar en la Selección, pero prefirió seguir esperando. Al año siguiente, volvieron a llamarlo pero él les respondió que esperaba la citación de Francia. Y así fue en 2017.
Hoy Kanté no sólo es campeón del mundo, sino que ahora el planeta entero conoce su historia, ejemplo para miles de chicos que luchan por sus sueños.