La honestidad intelectual no cotiza en Bolsa

El resultado que arrojó la elección en Estudiantes marcó un punto y aparte en la historia del club

La aplastante victoria de Juan Sebastián Verón, que fue adelantada el viernes en una encuesta publicada por este medio sobre la base del trabajo periodístico realizado durante el mes de septiembre, dejó bien claro que los socios le dieron la espalda a la vieja camada política del Pincha, que amparada en sistemas aristocráticos y tradicionalistas, se embarcó en una aventura haciéndole una lista en contra al máximo ídolo de la institución. 

En el medio, la conducta de ciertos dirigentes de la gestión saliente dejó mucha tela para cortar.  

Mientras algunos como Nancy Ferrari preservaron sus principios y se alejaron de Lombardi cuando el arquitecto decidió hacer una alianza con el sector de Julio Alegre, otros como Viviana Luna, Mariano Suárez o el propio Sergio Di Bella redoblaron la apuesta sacando a relucir una especie de rencor inusitado que tuvo su correlato en el armado de una lista entre gallos y medias noches, que estaba condenada al fracaso.

Un capítulo aparte merecen Guillermo Meseri y Oscar Cassata. El primero había dejado un vacío de poder en la secretaría de finanzas radicándose en Uruguay a mediados del 2012 y                   desapareciendo de la actividad dirigencial hasta el último mes, cuando en una especie de puesta en escena mediática salió a defender un balance que arrojó pasivo de 261 millones de pesos. 

Cassata, por su parte, desojó la margarita hasta último momento para definir si acompañaba al arquitecto, después de hablar pestes de Lombardi durante los últimos seis meses. 

Federico West Ocampo, en tanto, fue un ingrediente más de toda esta ensalada, perdiendo dos veces contra Verón en los últimos dos años: primero cuando era dirigente y Lombardi lo apartó del cargo, y  luego el sábado cuando intentó ganarle en la lista que lo enfrentó en las urnas. 

Todos ellos, en cierta forma, fueron responsables de cuestionar y señalar a Gerardo Villadeamigo el viernes en el estadio de 1, por ser éste uno de los pocos que mantuvo la equidad en el trato de la información con todos los medios por igual, aún cuando el resultado del trabajo realizado en la encuesta publicada por Hoy indicaba que el oficialismo tenía muy pocas chances de ganar la elección. ¿Habrá que pensar que algunos están acostumbrados a comprar a la prensa, y cuando la prensa no se vende la censuran? 

Una vez más, tal cual había ocurrido en noviembre del 2013 con las elecciones de Gimnasia, el Diario Hoy demostró que no todos los medios están infectados por intereses particulares, y que en pleno siglo XXI se puede defender con hechos el periodismo independiente y la libertad de expresión.  

La encuesta publicada el viernes, que fue difamada y cuestionada por el oficialismo sin conocer el tiempo y la dedicación inverttida en su elaboración,  arrojó un resultado similar al que finalmente se terminó dando en las elecciones.   

Entonces, una vez más, el Diario Hoy reflejó la realidad tal cual es...