La maldición de Di María
Debido a los reiterados problemas físicos que viene sufriendo Ángel Di María con la Selección argentina se está hablando de un caso pura y exclusivamente psicológico del jugador. En esta Copa América Centenario, Fideo sufrió una lesión muscular en el aductor derecho frente a Panamá que lo marginó de los últimos tres partidos. Sin embargo, hasta ayer parecía que estaba recuperado a tal punto que asomaba como titular para la definición del domingo.
Pero el cierre de la práctica que desarrolló el elenco nacional en Houston despertó la alerta, porque el volante del PSG acusó una dolencia en la zona, que fue tildada de “sobrecarga”. Los estudios demostraron incluso una adecuada evolución de la lesión.
Si se confirma que Di María se resintió por el edema quedará otra vez afuera de una final, tal como le sucedió en el Mundial y en la Copa América pasada, en la que fue sustituido en el primer tiempo.
En caso de que el rosarino quede descartado, y teniendo en cuenta la molestia que arrastra Nicolás Gaitán y la fractura de radio de Ezequiel Lavezzi, todas las fichas estarían puestas en Erik Lamela para ir desde el arranque. La otra alternativa sería la de meter al Kun Agüero.
El foco está en Rojo
Por segundo día consecutivo, Marcos Rojo debió trabajar de manera diferenciada, junto a Javier Pastore y Gaitán, por la contractura que sintió en las semifinales que lo obligó a salir del terreno de juego. De todos modos el defensor será seguido de cerca y esperado hasta cuando sea necesario.