La política en el Lobo: ¿vuelve el “pellegrinismo” puro?

La Asamblea de renovación parcial de autoridades se realizará en el transcurso del primer semestre y hay gestiones para seducir a socios que ya pasaron por la CD Albiazul.

En el transcurso del fin de semana, y tras los movimientos internos que surgieron en los últimos días del almanaque 2020, parte de la Comisión Directiva de Gimnasia se movió sigilosamente, cual alfil en el mismo tablero de ajedrez en donde el presidente Pellegrino se para en el fondo mirando a todos como en la posición de rey, para cerrar filas y reforzar los frentes ante otros dirigentes del mismo gobierno que no piensan de la misma manera.

Concretamente, están aquellos que responden ciegamente al presidente Gabriel Pellegrino, como Mauro Coronato, los secretarios Alejandro Ferrer y Daniel Giraud, y el otro vicepresidente Raúl Tassi, mientras que hay otros que están más cerca del vicepresidente Jorge Reina, como el tesorero Gerardo Marzola, al arquitecto Carlos Giménez y “el Banano” José Luis Staiano.

Estos últimos se mostraron con el vicepresidente del club en la parte baja de la platea techada del estadio del Bosque en el último partido de local de Gimnasia ante Talleres, mientras que el presidente con los otros directivos antes mencionados siguieron el encuentro en la parte superior de la misma tribuna.

Durante los primeros días del 2021, no fueron pocos los socios que buscaron interiorizarse sobre la memoria y el balance que debió presentarse en noviembre, antes de la Asamblea de renovación parcial de autoridades que quedó suspendida por la pandemia y la Resolución de Personas Jurídicas avalada por el Decreto Nacional de impedir la aglomeración de personas.
Además, noviembre fue un mes de fuertes sacudones en el club por todo lo que ocurrió con el cuerpo técnico de Maradona, la inesperada situación del jugador Johan Carbonero y en el medio el amago de renuncia del presidente que duró dos días.

Por todo esto, no son pocos los directivos “pellegrinistas” que se animaron a objetar la contratación ya acordada en diciembre de Fabio Radaelli para coordinar las divisiones inferiores, y ahora están dispuestos a limar viejas diferencias con otros socios que en diciembre del 2019 fueron desplazados en el armado de la lista del oficialismo para encarar las elecciones.

Uno de los que fue tentado a volver al club en la Asamblea de renovación de autoridades, que se podría realizar entre abril y mayo si la pandemia no avanza, es Ricardo Salas, amigo personal de Pellegrino, a quien Giraud y Ferrer le fueron quitando protagonismo a partir de la llegada de Maradona.

Consultado por este diario, uno de los responsables de la Secretaría General del Lobo adelantó que por el momento el club “se ajusta al decreto del Gobierno nacional y no llamará a Asamblea”.

De todas maneras, hay quienes dentro del propio oficialismo consideran que en el lapso de los próximos tres meses se daría un escenario óptimo para renovar par­cialmente las autoridades como indica el estatuto, ya que la oposición se mantiene quieta y dentro del propio gobierno hay una co­rriente de fortalecimiento de la figura del titular Albiazul avalada por algunos directivos.

Noticias Relacionadas