Licitaron los ascensores, el césped y el campo de juego del estadio de 1

El mes de agosto comenzó con una noticia que movilizó al mundo Estudiantes: se selló el acuerdo entre la institución pincharrata y el Banco Itaú por el préstamo de cinco millones de dólares -que se acreditarán en las próximas semanas- para la culminación de la obra del nuevo estadio Jorge Luis Hirschi.

Por su parte, la reconstrucción del reducto albirrojo se había frenado meses antes cuando el León confirmó el desembolso de más de dos millones de dólares, ordinarios de las cuentas del club, para la compra del campo de juego. En efecto, en este punto se centran los trabajos en el recinto de 1 y 57, donde aún se sigue removiendo el suelo con la labor de la empresa Marín, que intensificó los trabajos ante la decisión de licitar y adjudicar el césped en el cual se jugarán los partidos. 

Tal como se informó oportunamente, se estima que durante la última semana de diciembre, mes en el que se hayan cumplido 101 años del desembarco del club a estos terrenos, se culmine el campo de juego. 

Además, ayer la dirigencia confirmó que también se formaron los contratos para colocar los ascensores del edificio de palcos de calle 1. Allí también continúa trabajando la firma mencionada, quien tiene a cargo la obra civil del estadio. 

Según se supo, si la lluvia no lo impide, la semana que viene comenzarán las tareas de riego, drenaje y de las distintas capas del césped hasta llegar donde se siembra, sobre treinta centímetros de arena. A esa altura, según explicaron ayer desde la secretaría de obras, el césped tiene incorporado un cinco por ciento de nutrientes, que lo fortalece y lo hará crecer más rápido cada vez que sea cortado. Esto agilizará el mantenimiento de la futura cancha, que a diferencia de lo que ocurrirá en el Estadio Unico, contará con la energía solar natural ya que no tendrá una membrana de lona que lo tape durante gran parte del día. 

Además, también se acordaron los detalles para la adjudicación de la obra del techo que tendrá el edificio de los palcos, que siguen a la venta de los socios e interesados en poder comprarlos. 

Primavera roja y blanca

Todos los pronósticos elaborados por la dirigencia indican que durante los tres meses de la primavera la obra de la cancha sufrirá un avance notorio que la dejará con detalles finales para la observación, inspección y evaluación del estado municipal, que deberá habilitarla junto a la Aprevide para organizar partidos de alta convocatoria de gente. 

Tanto Juan José Calderón, como el ingeniero Miguel Menno son optimistas en que los meses de marzo y abril del 2019 serán claves para que Estudiantes pueda jugar nuevamente de local en La Plata, justo en el tramo final de la Superliga y con la Copa de la Liga en esplendor.