Mascherano: "El que quiere rosas tiene que pincharse"

Con sangre en el rostro y lágrimas en los ojos, Javier Macherano celebró con los puños en el cielo la agónica clasificación de la Selección Argentina a octavos de final. El experimentado jugador no tuvo su mejor partido, pero nadie podrá discutir sus ganas y empuje que demostró durante los 90 minutos.

Luego del triunfo, el "jefecito" dialogó con los medios y confesó: "Gracias a Dios pudimos sacar el partido adelante para sellar la clasificación a octavos. Ojalá sea una inyección anímica para afrontar lo que viene. No hicimos una buena primera fase y eso determina que debemos jugar contra Francia en octavos. Es un Mundial muy parejo".

Mascherano fue autocrítico y confesó: "No hice el mejor partido, cometí el penal. Pero también sé que di todo lo que tenía que dar. Para mí hubiese sido una lástima arruinarle el sueño a todos mis compañeros por ese penal".

 "Yo no quiero joder a nadie, no estoy pendiente de lo que dicen de mí. Si soy yo o no el villano, para mí, la historia ya está escrita", tiró a corazón abierto.

Sobre el final, Mascherano afirmó: "Lo de hoy debe servir para ganar en confianza, para creer. Fuimos a buscar la victoria con muchas ganas. Es verdad que no hubo mucho fútbol ni claridad. Pero si muchas ganas. El que quiere rosas tiene que pincharse".