Pinchado
El equipo de Domínguez parecía tener una noche tranquila, abrió rápido el partido con Sosa, pero después en un penal empató la visita y Estudiantes nunca más logró vulnerarlo. Cinco sin perder, pero con dos empates ante los más flojos del campeonato.
Estudiantes de La Plata no tuvo su mejor presentación en el comienzo de la fecha número 20 de la Liga Profesional. Fue igualdad 1-1 ante Independiente Rivadavia de Mendoza, con goles de José Sosa y Franco Romero, respectivamente, los dos desde el punto penal. El conjunto de Eduardo Domínguez llegó a los 28 puntos en la tabla de posiciones.
La historia en el estadio Jorge Luis Hirschi no pudo comenzar mejor para Estudiantes. Corrían cinco minutos cuando una mano en el área del paraguayo Ivan Villalba ante un remate de Tobio Burgos le permitió al Príncipe tener la posibilidad de ejecutar un penal. El capitán abrió el pie y la colocó contra el ángulo izquierdo del arco que da a la cabecera de 57, encima el festejo fue con la estatua de Carlos Salvador Bilardo, dándole un mimo a su mentor.
Parecía un atardecer tranquilo para el Pincha, que controló el balón con una fenomenal actuación de Sosa, pero no aparecieron las situaciones de peligro, un tibio remate de Manyoma y algunos avances de Meza y Benedetti encendieron las alarmas, pero sin usufructuar.
Independiente no mostró muchos argumentos para ponerse en partido, solo alguna pincelada del colombiano Villa, aunque a los 35 minutos se encontró con una mano de Benedetti en el área, que a instancias del Var fue sancionado y Romero, chico formado en las inferiores albirrojas, cambió por gol con un tiro cruzado.
El inicio del complemento tuvo movimientos rápidos y contundentes del banco pincharrata. Giménez y la vuelta de Carrillo en reemplazo de Tobio Burgos y Kociubinski le dieron otra impronta al equipo en ataque. Llegaron las aproximaciones, con una visita encofrada en su área y tomando aire a pelotazos.
Cetré se metió, luego el chico Pérez y finalmente Arzamendia, ninguno logró darle lo necesario a Estudiantes para encontrarse con el segundo tanto y quedarse con la victoria. La historia finalizó y ahora, el León deberá pensar en el choque del próximo martes en el Bajo Flores con San Lorenzo.