Sampaoli se atornilló al cargo y mete en el medio a dos ex Estudiantes

Sampaoli se arrepintió de viajar con la Selección Sub 20 al torneo de A’lcudia y sugirió que sea Lionel Scaloni el responsable de encabezar la delegación

Sobre llovido, mojado…

Cuando todo parecía calmarse de forma temporal en la Selección, ayer volvió todo a la normalidad. O mejor dicho, a la anormalidad, ya que Jorge Sampaoli se arrepintió de viajar con la Selección Sub 20 al torneo de A’lcudia y sugirió que sea Lionel Scaloni el responsable de encabezar la delegación. 

La propuesta llegó después de que el propio Hermes Desio, hermano del preparador físico Jorge Desio y coordinador de las selecciones juveniles se haya expresado en contra de cualquier tipo de intervención de la conducción del seleccionado mayor en un campeonato internacional destinado para jugadores en etapa de formación como el Sub 20. 

Sampaoli, que permanece en Buenos Aires, le informó la decisión a Claudio Tapia en el predio de Ezeiza, luego de haber discutido con Scaloni, uno de los últimos integrantes del cuerpo técnico que todavía le responden y que no le habían renunciado como lo hicieron Sebastián Beccacece y Nicolás Diez. 

Así las cosas, dos ex hombres ligados a Estudiantes, como Scaloni (por su pasado como jugador) y Desio (como coordinador y técnico de la Reserva), quedaron envueltos en otro entramado escandaloso que tiene a la Selección Argentina en llamas. 

Tal cual se informó en la edición de ayer, ante la falta de un reemplazante que convenza a todas las partes, Jorge Sampaoli juega su partido como si se tratase de un duelo de ajedrez: observa cómo Angelici le baja los decibeles a los intentos de instalar mediaticamente a Simeone o Gallardo (ligados a River) y gana tiempo para perpetuarse en el cargo, de forma simultánea a que Francia y Croacia, los verdugos Argentina, se aseguran un lugar en la Final del Mundial. ¿Acaso alguien puede negar que esta situación atenúa la eliminación tempranera de Argentina que perdió contra estos dos rivales? 

Lo cierto es que Sampaoli no tiene consenso para seguir, y lejos de resignarse, parece aprovechar cada segundo para sacar tajada y lograr revertir una situación que parece insostenible en el tiempo.