La China y Vicuña, en el live de la discordia

En el marco, del festejo del cumpleaños de Beltrán, Bautista inició una transmisión de Instagram, en la que se pudo ver una breve discusión entre los actores.

El lunes Beltrán, el hijo de Carolina “Pampita” Ardohain y Benjamín Vicuña, cumplió ocho años. Aunque en el contexto de la pandemia el festejo fue súper íntimo, tuvo doble celebración: al mediodía en la casa de su mamá y a la noche en la de su papá.

Tanto la top model como el actor compartieron algunas postales de la intimidad del agasajo con las familias ensambladas. Al mediodía, en la casa de zona norte que Pampita comparte junto a su marido, Roberto García Moritán, dijeron presente sus hermanos, Bautista y Benicio, y los hijos del empresario gastronómico, Delfina y Santino.

Más tarde, los tres niños que la modelo tuvo con el actor chileno, se marcharon a la casa de su papá para seguir festejando. Allí los esperaban Vicuña, la China Suárez, Magnolia y Rufina, hija de Eugenia y Nicolás Cabré.

Pese a la cuarentena, no faltaron las tortas, los globos, los regalos y el cotillón. Tampoco las postales de celebración. Sin embargo, la verdadera polémica se desató en las redes luego de que Bautista, el mayor de los hermanos, comenzara a transmitir un vivo de Instagram en el que de fondo se ve a la China Suárez y a Vicuña protagonizar una breve discusión hogareña hasta que se dan cuenta que están saliendo al aire.

“A ver, esto es así”, dijo contundente Vicuña, a lo que ella le respondió: “¿Qué mi amor? Está toda húmeda la leña o le tiraste vos el coso”. Entonces, el actor se percata de que su hijo está con el teléfono y le advierte: “Mi amor estás en vivo para todo el mundo”; a lo que él retruca: “No me está viendo nadie papá. China…”; y ella lo interrumpe: “Es peor lo que me acabás de contestar vos”.

Si bien se trata de un intercambio cotidiano y menor el que protagonizaron los actores, lo cierto es que ambos resguardan bajo absoluta reserva su intimidad. Como opinó con picardía Ángel de Brito en su ciclo radial: “Es una discusión doméstica que le puede pasar a cualquiera, pero ahí se lo vio menos poéticos que en las redes y más humanos”.

Pese a que lo ocurrido fue tema de debate, ellos hicieron lo de siempre: callar y dejar que hablen hasta que se agote el tema.