ENTREVISTA EXCLUSIVA
Luis Rubio: “Trato de hacer humor de una forma respetuosa”
El intérprete, reconocido por sus personajes como Eber Ludueña y Evaristo Hurtado, entre otros, manifestó cómo lleva a cabo el oficio y presentó su espectáculo en streaming.
En una charla con diario Hoy, Luis Rubio reflexionó sobre los modos de producción en los tiempos que imperan. También precisó los detalles de Humor a la camiseta, el show virtual que dará el 4 de octubre, desde las 21.30, por Arshowlive.
—En tiempos de pandemia, ¿cómo se sobrevive a la rutina y al alejamiento del trabajo físico?
—Es difícil adaptarse a esta nueva forma. En el inicio fue una especie de shock. Cuando se genera la sensación de que llegó para quedarse, cambia el tono y es más dramático. Como todos los mortales y habitantes del planeta Tierra, nos enfocamos en los quehaceres domésticos, luego adaptamos los micrófonos o las cámaras para trabajar en la radio, hacer Zoom, entre otros. A veces estoy motivado u otras con desasosiego, soy inquieto pero sé que es un momento delicado.
—¿Este contexto inusual te ayudó a la hora de escribir y hacer humor?
—He escrito bastante sobre este asunto, sobre todo el costado donde se puede encontrar una cosa humorística dentro del encierro en una pandemia que genera dolor y por la que mucha gente está golpeada. Lo hago con máxima responsabilidad, porque hace 30 años que me dedico a esto e intento buscar esos lares para hacerlo más llevadero. Todos estamos angustiados, en crisis, asustados y trato de acompañar desde mi lugar. Desde que inició el confinamiento genero contenido para las redes sociales para así tener la cabeza ocupada. Es el monotema, es inevitable tocarlo, esperemos que pase pronto.
—¿Cómo analizás el boom de las redes sociales para tu profesión? ¿Y los shows virtuales?
—Las uso, no reniego de ello. No me dedico de lleno al tema, pero las tengo ahí acompañando mi profesión, mi oficio. De hecho trabajo con alguien más joven que me ayuda a cómo mostrar, qué decir, cuál es el momento exacto, porque tengo 54 y soy de otra generación. Es una herramienta que me sirve para comunicar todo lo que hago, llegar a la gente, llevarles una sonrisa. Respecto a los shows virtuales, son raros. Siempre digo que son como jugar al tenis por carta porque no hay respuesta, tarda en llegar, es festejar un gol con el VAR. Hay un delay que atenta un poco hacia el laburo del comediante pero no queda otra, no hay elección.
—En momentos donde los paradigmas
sociales y políticos cambian constantemente, ¿cuáles son los parámetros para el oficio de humorista?
—He visto procesos distintos. Trato de hacer humor de una forma respetuosa; considero que se transmiten ideas a través de la risa e intento estar de acuerdo con lo que comunico. Esa es mi responsabilidad como comediante. El primer filtro cuando escribo es que me divierta y esté conforme.
—¿Por qué aconsejarías al público que vea el show?
—Es muy variado, hay diversas voces y colores. Pasan diferentes monologuistas, son todas ciertas. Es gente que no es profesional del humo, pero que lo hace muy bien y que podría serlo. Todos tienen una tendencia histriónica. Hay historias, cosas de la vida cotidiana, el folclore del fútbol, entre otros.