Entrevista exclusiva

Martín Slipak: “La televisión colaboró a construir una mirada exitista”

En tiempos de pandemia, todo pasa por las redes sociales y los vínculos virtuales. La serie protagonizada por Slipak es una lúcida crítica a este universo que crece día a día.

Con Tiempo perdido, de Francisco Novick y Natalio Pagés, pendiente de estrenar, y tras presentar Celine, con Marilú Marini, dirigida por él mismo; el talentoso Martín Slipak protagoniza Pepper, todo por un like, de Jonathan Barg, que puede verse a través de Flow.

Allí, interpreta a un influencer que vive de las redes sociales y canjes, hasta que comienza a perder seguidores. Diario Hoy dialogó con él para más detalles de la propuesta.

—¿Cómo llevas esta situación extraordinaria?

—No me puedo deprimir porque tengo una hija. Intento sacar la parte buena del tiempo que sobra, viendo películas y series que tenía pendientes. Tengo la suerte que repusieron en TV abierta un programa por el cual recibo un dinero que me permite vivir, pero es una situación muy tremenda para las actrices y los actores. Nos dimos cuenta de que somos el último orejón del tarro en relación a muchas cosas. Ya estaba esto, el tipo de vida y ser freelance genera una sensación de desamparo bastante fuerte.

—¿Por qué crees que es así?

—Siempre fue un poco así, hay algo que es cierto que hay oficios que ante la emergencia son fundamentales, pero no lo sé por qué queda la cultura para el final.

—Digo cultura… porque a la televisión se puede ir a cocinar y cantar…

—Claro, y creo que ese fue el golpe, y empezamos a preguntarnos cuán esencial es la cultura, creo que nos fuimos y se fue descuidando, el hecho que no haya ficción no es tan distinto a lo que pasaba antes. No es que la pandemia paró la industria, sino que ya estaba parada. Si bien algunos tenemos la suerte de tener trabajo con continuidad es una industria abandonada, no había prácticamente ficción.

Era una industria monopolizada, eran muy pocos los que producían y las leyes y subsidios están para que filmen los que ya lo hacen. Es difícil hacerlo desde cero, los canales que producen ficción son muy pocos y esto ya estaba aquietado. La pandemia fue la gota final para darnos cuenta de que estamos muy en el fondo en lo audiovisual. Creo que por eso, cuando sale una propuesta como Pepper, independiente, con calidad como extranjera, que es lo que me dicen, sorprende, y no debería hacerlo.

—Debería sorprender por el contenido…

—Claro, creo que hay algo del ingenio que está totalmente desaprovechado. He conocido productores, directores, actores y actrices geniales que trabajan muy poco, directores que tienen una sola película, con ideas y guiones espectaculares sin filmar, hay algo detenido y yo estoy contento por lo que está pasando con la serie.

—¿Crees que por el mismo tema que trata Pepper la industria se volcó hacia influencers y no obtuvo el resultado esperado?

—Puede ser, para mí la serie tiene una mirada crítica, no baja línea, eso es interesante. Como sociedad, la televisión colaboró a construir una mirada muy exitista y las redes están volcadas hacia eso. El contenido que funciona ronda alrededor del éxito y de ganar, eso destruye culturalmente, el contenido es muy vacuo. La única aspiración es el éxito por el éxito en sí.

Noticias Relacionadas