entrevista
Moria Casán y Jorge Marrale estrenan Cuestión de género
Los talentosos intérpretes se baten en un duelo actoral junto a Paula Kohan y Ariel Pérez De María.
Moria Casán y Jorge Marrale se presentan juntos por primera vez en el Teatro Metropolitan (CABA) con la comedia Cuestión de género de Jade-Rose Parker, con dirección de Nelson Valente y producción general de Pablo Kompel, Tomás Rottemberg y Ricardo Hornos. Para saber más de la obra, hablamos en exclusiva con la dupla.
—¿Cómo es que nunca se habían cruzado en el escenario?
—Jorge Marrale: De tablas, porque nos habíamos cruzado circunstancialmente en la serie Doble Vida. Pero no nos cruzamos.
—Moria Casán: Pero nunca hicimos una escena. Participábamos de la serie, pero nunca hicimos una escena.
—JM: Y acá tuvimos una suerte. Algunas personas me dijeron Che, esta combinación de estos dos podría ser, ¿no? Y la verdad es que a mí me pareció fantástico. Si hubo algo, leí la pieza, obviamente, primero. Pero si hubo algo que a mí me parecía que era muy atractivo, primero conocerla a Moria laburando en el escenario. Yo siempre tuve como una particular admiración. Pero además por su cabeza, y se lo digo a ella. Una cabeza muy importante, la de Moria. Pero además tener la posibilidad de trabajar con ella, de decir, bueno, yo tenía como la idea de que la onda iba a ser muy buena. Y se confirmó, porque tenemos una cabeza muy piola, los dos.
—MC: Los dos parecidos. Muy parecidos, hubo un química, en serio. Fluyó todo en la lectura, en la primera lectura, tenemos 35 páginas en el primer acto, los dos. Te vas descubriendo escénicamente, es un placer. Y él está desopilante. Es un muy buen actor. Está muy genial. Es un desaforado, un loco de..., no puede bancarse una mujer como yo, que no se banca, la quiere, pero hay unas cosas que no se bancan, pero no como compañero, estoy hablando de la pieza, somos compañeros extraordinarios. Es muy difícil buscar una química. Ninguno de los dos es calecitero. No queremos sacar la sortija enseguida, ¿viste? Por eso es importante. No le digo ahí, mi amor, esa cosa de dónde vengo, a dónde voy, más efectivo, expeditivo, y lo que molesta, fuera. Y lo que no, lo trabajamos.
—Ahora los ensayos y compartir todas las semanas, digo, es importante que esto sea con ganas…
—MC: Obvio, con ganas.
—JM: Y además, ojo, que nosotros sabíamos, por los compromisos que teníamos, Moria tenía que estar en Mar del Plata, Brujas. Yo tenía que hacer la película con dirección de Fernán Mirás. Y tuvimos la buena idea de juntarnos en noviembre a pasar letra, a pasar, a pasar, sentados. Se fue conformando un poco, la idea de cómo íbamos a hacer.
—MC: Y estamos ensayando ya va a ser seis semanas. Y lo montamos. En seis semanas, que es poco. Las obras se pasaban en tres meses, entonces ensayamos. Y ahora estamos haciendo, desde el martes, ensayos con ropa y cambios. Igual que si fuera en función. Porque por suerte los productores, que son una compañía muy estupenda, nos dio la escenografía lista y todo listo.
—JM: Trabajaron mucho para tener la escenografía a tiempo.
—MC: Eso es insólito. Nadie recuerda que alguien te dé una escenografía 15 días antes. Están los últimos días clavando clavitos. Acá hay un apoyo.