No dormirás: los secretos de un fenómeno de la taquilla nacional

Con casi 100.000 espectadores desde su estreno, a mediados de enero, No dormirás es la película argentina de terror más exitosa, confirmando que el género no para de crecer en nuestro cine y en el mundo entero. Con Belén Rueda, Eugenia Tobal y Eva de Dominici como protagonistas, esta coproducción entre la Argentina, España y Uruguay surgió en la mente sin pausa de su director, el uruguayo Gustavo Hernández, en una noche de insomnio y revelaciones. 

La historia tiene lugar en un hospital psiquiátrico, donde un grupo de teatro prepara una obra en condiciones extremas. A medida que pasan los días sin dormir, los personajes “alcanzan nuevos umbrales de percepción, que los enfrentan a energías e historias ocultas del lugar”. En ese marco se desata el terror. 

En una charla íntima, el director habló con diario Hoy sobre el éxito del filme, reveló detalles sobre el proceso de producción y recordó el camino que lo llevó a ser uno de los protagonistas de la cartelera nacional durante este verano. 

—¿Cómo fue la experiencia personal que originó  No dormirás?

—Después de un rodaje muy complicado, llegué a mi casa tras 48 horas sin dormir y no podía pegar un ojo. Seguía pasado de vuelta y me entretuve con un juego de precisión de mi hijo, en el que siempre había sido malo. De repente todos mis sentidos estaban alineados, estaba concentrado y me adelantaba a las situaciones. Batí un récord y al día siguiente no entendíamos cómo. El cansancio me había dejado en estado de alerta. Empecé a leer sobre el insomnio y las consecuencias de una vigilia prolongada, y encontré el tema para la película.

—Hoy es un éxito de taquilla...

—Sí, se convirtió en el filme argentino del género de terror más visto en el país. Es muy lindo, porque trabajamos mucho, y cuando la gente acompaña está buenísimo, todo ese sacrificio tiene un resultado

—La grabaste en la Argentina y en España, ¿cuál es la diferencia con el cine de Uruguay?

—Esto es algo mucho más grande, el equipo de la Argentina y de España es de primerísimo nivel, fue como subir a otra categoría, desde el primer día la experiencia fue maravillosa. Estábamos todos en una misma línea, trabajando en lo que amamos, muy involucrados en la convivencia del día a día en un rodaje. Ese es, justamente, uno de los temas de la película: qué hacer y hasta dónde ir por lo que amamos. Lo vivimos dentro del rodaje, hubo mucho compañerismo, fue una experiencia tremenda. 

—Hay un crecimiento en tus producciones, ¿cuáles fueron tus desafíos como director?

—Creo que La casa muda, mi primer película, fue el puntapié inicial. Se grabó en cuatro días, con una cámara de fotos, en un plano secuencia, con una sola locación, tres actores y un presupuesto de ocho mil dólares. Y de repente, terminó estrenándose en el festival de Cannes, se vendió a todos lados y tuvo una remake americana. Eso me abrió muchas puertas. 

Ahora, a Gustavo Hernández le espera un año de viajes y estrenos. “La película fue vendida en Europa, Asia y toda América”, contó. De un festival a otro, el director va abriendo nuevos caminos en el cine de terror, un fenómeno que crece en todo el mundo.