¡Ay amor!
Un 13 de agosto nació Leo Mattioli
El "León Santafesino" cumpliría 48 años.
No es un día más para la música nacional. Un 13 de agosto de 1972, nació en Santo Tomé, provincia de Santa Fe, Leonardo Guillermo Mattioli. Uno de los principales referentes de la cumbia argentina y romántica. Hoy, el "León Santafesino" cumpliría 48 años de edad. Diario Hoy hará un repaso por su vida y su carrera artística.
Sus primeros años
Durante su infancia, Leo Mattioli se crió en un complejo de viviendas que quedaba cerca del estadio de Colón de Santa Fe. Desde chiquito, ya sentía amor por la música y el canto. Su pasión estaba centrada allí y eso le generaba un dolor de cabeza en la escuela, ya que le costaba estudiar. Completó sus estudios primarios, pero en la secundaria dijo basta, luego de que lo expulsaran.
Tras una charla con su madre, decidió trabajar y luego de varias disputas, ya que la misma no estaba de acuerdo, logró su objetivo. A los 17 años conoció el amor, tras ponerse en pareja con una chica de 14. Su nombre era Marina Rosas y él nunca se imaginó, que sería su esposa y el amor de su vida. Al tiempo, tuvieron su primer hijo, Nicolás. Y luego, con el paso de los años, vendrían cinco niñas más.
Se mudaron juntos, a un complejo humilde, en el cúal tenían una garrafa que alimentaba una pequeña hornalla de la cocina. Pero lo que no le faltó a ese lugar, fue el amor. Allí comenzó a formar su familia y su fuerte deseo de dedicarse a la música. Y esa oportunidad le llegó a los 20 años...
Comienza a nacer el "León"
Desde el inicio, Leo marcó una enorme diferencia por su voz y su carisma arriba de los escenarios, sumado a la elegancia y el romanticismo. Fue un locutor durante un recital, que lo apodó el "León Santafesino". Tenía el talento nato de convertirse en un gran artista, de la cumbia romántica.
De a poco, su carrera fue creciendo como también mejoró su situación económica. Así pudo construir su casa y él mismo, en un papel, diseño la misma. Y luego la amplío, cuando fueron naciendo sus hijos. En total, tuvo seis herederos: Nicolás, Julieta, María Laura, Romina, Tamara y Denise Amor Mattioli.
La decisión junto a su familia, fue de mantenerse en el lugar de orígen. Así decidieron construir su nueva casa en Santo Tomé; más precisamente en el barrio Luz y Fuerza. Todos los días se levantaba a las 06:30 para prepararle el desayuno a sus hijos, para luego llevarlos a la escuela. Más allá de las giras y la enorme cantidad de recitales, era un tipo familiero y que disfrutaba de los momentos con su gente cercana.
Una de las principales características que llevaron al "León" a ser leyenda, fue que su historia de vida la trasladó a sus letras. Esa fue una de sus principales virtudes: la composición. Así logró grandes éxitos, incluso en su etapa en Trinidad. Con el grupo, fue la voz de siete discos (1994-1999): La gran tentación (1994), Un ratito (1995), Mas románticos que nunca (1997), Más caliente que nunca (1998), Nuevamente (1998), Mas Trinidad que nunca (1999) y Se cansó de esperar (1999).
Tanto fue el crecimiento que tuvo, que comenzó a nacer en él, la llama de empezar a seguir su propio camino. Y un accidente fatal, el 15 de enero del 2000, cambió su vida para siempre...
Un antes y un después
Estuvo grave y al borde la muerte, pero por su fortaleza, pudo salir adelante. El 15 de enero del 2000, junto a los integrantes de Trinidad, sufrió un terrible accidente que les costó la vida a Sergio Reyes y Darío Bevegni, sus compañeros de grupo. Leo fue operado y estuvo tres meses en etapa de recuperación.
Mientras se recuperaba en el hospital, creó las canciones que marcarían su primer disco solista: Un homenaje al cielo. Cuando pudo recuperarse y volver a subirse a los escenarios, fue otro Leo Mattioli. Había perdido mucho peso, sufría dolores en su columna vertebral y en otras partes de su cuerpo.
Pese a todas estas complicaciones, sobrellevó los malos tragos internos para seguir deleitando con su música. Y así, en lo artístico, fue creciendo, ya que su disco fue un éxito. Se dio el lujo de llenar dos Gran Rex, en diciembre de 2001 y de brindar grandes recitales. Bajo su pluma y guitarra, nacieron verdaderos íconos de la cumbia santafesina.
Me preocupa sin ti, Llorarás más de 10 veces por amor, Como podré, Y vete ya, Carta al corazón, Después de ti y Le pido a Dios, fueron grandes temas que compuso. Y además le dio su estilo al tema de Cacho Castaña, Tramposa y mentirosa. Lo apropió en el buen sentido de la palabra, dándole su estilo, como resultado de la profunda admiración que tenía el "León" por el cantante de tango.
En total como solista, Leo Mattioli sacó 16 discos: Un homenaje al cielo (2000), En directo, piel con piel (2001), Ese soy yo (2001), Ay amor, corazón gitano (2002), Sin palabras (2002),Canciones románticas con un toque de «ay, amor» (2003), Creciendo (2004), Aún sigue la lección (2004), El señor del amor (2005), Esto... es romántico (2006), Acústico (2006), Amor a mi manera (2007), El rey del amor (2008), En vivo en el Teatro Gran Rex (2008), El amor y la pasión nunca morirán (2009) y
Ayer, hoy y siempre romántico (2010).
Sus problemas de salud y su muerte
Con el correr de los años, las secuelas de aquel trágico accidente fueron grandes y el "León" las padeció. Más allá de los dolores de columna, también tenía problemas en su corazón y en sus pulmones, debido al cigarrillo. Por estas causas tuvo varias internaciones, de las cuáles dos fueron graves: una en Santiago del Estero (2006) y otra en Santa Fe (2009).
Su fortaleza volvió a prevalecer y pudo salir adelante, pero en 2011, el corazón del "León" se apagó para siempre y cerca de cumplir de cumplir los 39 años, falleció el 7 de agosto de 2011. Leo sufrió un paro cardiorespiratorio en un hotel de Necochea, luego de brindar un recital en Mar del Plata. Ese día nació la leyenda de la cumbia argentina. Más allá de no estar más físicamente, Leo Mattioli quedó vivo en sus canciones, sus discos y en el amor de su gente.