Aparecieron alacranes venenosos en un edificio del centro de La Plata
Una joven estudiante de la ciudad se llevó un gran susto al querer ducharse y encontrar un alacrán en su bañera. Según contó a diario Hoy “es la tercera o cuarta vez que me pasa”.
Los escorpiones o alacranes son artrópodos arácnidos depredadores. Viven sobre todo en los desiertos, pero se han adaptado a una amplia gama de condiciones ambientales. Utilizan sus pinzas para sujetar y matar a sus presas con el aguijón pero, según la especie, pueden ser peligrosos para la salud humana y pueden causar envenenamientos graves e incluso letales, pero que son prevenibles y tratables.
Algo de esta información sabía Lara Litt, la joven platense que descubrió en su departamento de 55 y 11, en pleno centro de nuestra ciudad, un alacrán cuando se iba a bañar. “Lo encontré el martes a la tardecita, cuando me estaba por ir a bañar. Apareció en la bañadera como ya me había pasado en otras situaciones, más o menos unas cuatro o cinco veces”, afirmó la joven, quien ya no se muestra sorprendida por el hallazgo.
“Este era bastante grande, más que las otras veces. Hice lo que suelo hacer en general, que es ponerle un frasco encima, un papel por debajo y dar vuelta el frasco y sacarlo. Las veces anteriores lo tiré por el inodoro; la primera vez que encontré uno lo pisé, pero la verdad que no me siento cómoda pisándolos”, dice Lara, que esta vez actuó diferente. “Con este no me sentía cómoda matándolo, así que ahora lo deje en un frasco (y hasta le di de comer bichitos). Me comuniqué con la Municipalidad, ellos le iban a pasar la información a Zoonosis y supuestamente lo van a venir a buscar y van a revisar el techo y demás. Aparentemente, debemos tener algún nido de alacranes en el edificio, en algún desagote o en el techo, porque ya han aparecido tanto en el departamento del mi vecina como en la entrada del edificio”, comentó.
¿Qué hacer ante la picadura de un alacrán y cuáles son los síntomas?
Es fundamental la rapidez de la consulta. Se recomienda colocar hielo en el sitio afectado para aliviar las molestias mientras se transporta a la persona, y en lo posible llevar el escorpión para que sea identificado.
La manifestación local es el dolor agudo, punzante y muy intenso en la zona de la picadura, que puede extenderse hacia el tronco. Además, se puede producir enrojecimiento y sensación de hormigueo y en ciertos casos, puede encontrarse “piel de gallina”. En niños es más frecuente la excitación y el temblor generalizado acompañado de llanto o gemidos constantes.
Cuando existe envenenamiento generalizado, a los síntomas locales se les agregan manifestaciones sistémicas por compromiso del sistema nervioso y otros tejidos que complican el cuadro. Estos son: taquicardia, dificultad respiratoria, salivación, lagrimeo y temblores, entre otros. En casos graves pueden presentarse vómitos, diarrea y alteraciones cardíacas, llegando incluso a la muerte. Si esto sucediera, la persona debe ser trasladada con urgencia a un hospital para ser atendida a la brevedad y, si fuese necesaria, la aplicación del antiveneno antiescorpiónico para neutralizar la toxina.
Por último, la joven Lara nos manifestó que “esta es la primera vez que me comunico con Zoonosis para hacer algo al respecto, porque la verdad es que con mi vecina lo hemos hablado y nunca hicimos nada. Si encontráramos a un arácnido gigante y peludo, te asustas toda pero lo pisas y chau. Pero ya van varias veces con los alacranes y esta fue como listo, hay que hacer algo”.