Cuáles son las claves para el futuro de la educación en Argentina

Si algo dejó en evidencia la pandemia del coronavirus en la Argentina fueron las diversas situaciones que cada región atraviesa en cuanto a lo educativo, o más concretamente, las diferencias sociales al momento de garantizar el acceso a la educación y la continuidad del aprendizaje en un contexto de crisis.

El nuevo desafío es evaluar las secuelas que dejará esta situación tan particular que vivió el mundo y los cambios que habrá que enfrentar en los años siguientes en las escuelas. Ante ese escenario, diario Hoy dialogó con la autora, capacitadora, formadora docente y consultora en educación Laura Lewin.

“Me encantaría pensar que va­mos a capitalizar lo que pasó y aprovechar este aprendizaje para transformar la educación. Estamos viendo alumnos que muchas veces ven una clase por Zoom y dicen que se aburren, porque no interactúan con lo que pasa. Los alumnos necesiten involucrarse cognitiva y emocionalmente con lo que pasa en el aula”, manifestó Lewin.

En ese sentido, la profesional destacó como expresión de deseo que “ojalá este sea el puntapié para salir de la clase magistral donde el docente cubre los temas, y que podamos involucrar a los chicos en experiencias interesantes

La importancia de los vínculos

Para Lewin, el futuro de la educación en nuestro país debería contemplar la formación de espacios de contención más sanos para niños y adolescentes. Es decir, que además de aprender los contenidos puedan generar vínculos afectivos.“Con la pandemia vimos la necesidad del vínculo, entonces debemos poner sobre la mesa la importancia de las emociones en el aprendizaje. Generar aulas sanas donde podamos cuidar el autoestima de los alumnos. Vemos que los chicos hoy apagan sus cámaras porque tienen miedo a que los burlen o los expongan, por eso tenemos que trabajar sobre la formación de aulas sanas”, aseguró.

Cambios de contenido

En cuanto al trabajo en las aulas, el paso a futuro será evaluar cuáles son los contenidos que los chicos necesitan de cara a una educación completa y de calidad. Por eso, la profesional destacó la importancia de aplicar algunos que les sean interesantes y capten su atención.“Estamos viendo en esta pandemia que no todo era tan importante, entonces se podría hacer un recorte y pensar qué estamos enseñando y cuáles son las necesidades para hacerlo más interesante. Te­nemos que trabajar con las habilidades que tienen los chicos, más que en hacerlos repetir ciertos contenidos de memoria”, puntualizó Lewin.

Además, destacó todos los pro y los contra que trajo el uso de la tecnología en medio de la cuarentena, ya que muchos pudieron aprender nuevas habilidades (incluso los propios docentes), mientras que a otros tantos les ha costado mucho más por las diferencias de acceso a internet o los dispositivos.“Si bien la tecnología no es la solución, es la gran oportunidad para que puedan aprender mucho más alineados con sus maneras. Las clases online 100% no resultan porque falta la parte social, entonces podríamos pensar en una modalidad combinada. Es mucho más interesante trabajar con la tecnología o la realidad virtual para aplicar los conocimientos, es una gran oportunidad”, aseguró.