Durante la cuarentena, aumentaron los accidentes domésticos con niños

"Más de la mitad de los episodios es evitable", afirman especialistas del Hospital de Clínicas.

Con el aislamiento, aumentaron los accidentes domésticos con chicos, informan pediatras que atienden por teleconsulta o en las guardias. Los niños son más propensos a estos sucesos por desconocer los riesgos que existen en el hogar. Sin embargo, existen medidas de prevención que sirven para evitar desgarros, cortes, quemaduras o microfracturas.

"La palabra accidente remite a un desatino, mala suerte o a algo inevitable pero es fundamental desarrollar una visión crítica por parte de los padres o los cuidadores para detectar a tiempo las posibles causales de un incidente, que en el hogar son muchas”, advierte Mariale Ghiggi (M.N. 90.166), del departamento de Pediatría del Hospital de Clínicas.

Según explicó, más de la mitad de los episodios domésticos es evitable. Hablar de prevención en estos casos significa anticipar, desconfiar y desarrollar la capacidad de ver aquellas superficies hogareñas como peligros para los más chicos.

“Recorrer la casa con la mirada de chico es crucial. Hay muchos objetos peligrosos que resultan atractivos para los menores como medicamentos o cuchillos”, comenta la especialista. De hecho, la mayoría de los accidentes domésticos ocurre en la cocina.

Los episodios más frecuentes en esta cuarentena están relacionados con las quemaduras por agua hirviendo de infusiones como el café o el mate: lo usual es que los chicos quieran agarrar el termo y se quemen con el agua. También se ven golpes en la cabeza por caídas de la cama o de la silla, junto a las heridas cortantes por muebles o la punta de una mesa.

El contexto del aislamiento hizo también que muchos chicos que antes pasaban la mayor parte de su día en guarderías, jardines o colegios estén más tiempo en sus casas, donde muchas veces por distintas razones no cuentan con los elementos de seguridad necesarios.

“Hay casas en construcción que no cuentan con barandas en las escaleras ni tienen los tomacorrientes tapados, lo que constituye un peligro grave para los chicos”, agrega la especialista.

“Dependiendo de la gravedad de la lesión se puede actuar rápido dentro la casa. Cuando se trate de quemaduras, lo primero que podemos hacer es aplicar un paño de agua fría en el área afectada, y en el caso de golpes en la cabeza poner hielo envuelto en un plástico o paño pero nunca directamente sobre el chichón”, comenta Ghiggi.

Cuando se trata de lesiones y cortes, es prudente parar el sangrado y ver la dimensión de la herida, y si las partes del corte están a más de un centímetro, se debe acudir a un profesional. Lo mismo cuando la quemadura presenta ampollas o cuando luego del golpe el chico no reaccione ni llore, lo que hace pensar que puede haber perdido el conocimiento. En todos estos casos, se debe acudir a un centro de salud.