El viento volvió a causar estragos en la ciudad
Como en una historia de nunca acabar, anoche el viento volvió a poner en evidencia la imprevisión de una ciudad que todavía no puede hacer frente a los fenómenos climatológicos intensos. Así, árboles caídos, autos dañados por ramas de gran porte y hasta una columna de alumbrado público derribada por completo fueron parte del preocupante panorama de ayer.
Los primeros reportes llegaron a la redacción de este medio hacia las 20. Algunas de las situaciones más problemáticas se dieron en 14, entre 35 y 36, donde las ráfagas de hasta 72 kilómetros por hora tiraron ramas de gran porte. Una situación similar se dio en 138 entre 528 y 529, donde parte de un árbol cayó sobre un auto, sin heridos.
En tanto, sobre la rambla de 32, entre 3 y 4, una columna de alumbrado público se vino abajo por completo y, aún en el piso, su luz se mantenía encendida, lo que generó la alerta de los vecinos ante el riesgo de electrocución. A su vez, frentistas advirtieron que el viento giró el semáforo de 461 y Camino Centenario. Según aseguraron, esto ocurre cada vez que hay fuertes ráfagas, dado que su base está destruida.
Mientras tanto, la empresa Edelap pidió a los usuarios que, entre otros recaudos, evitaran el contacto con cables cortados e instalaciones eléctricas externas, que no intentaran retirar objetos caídos sobre el tendido eléctrico y no circularan por la vía pública bajo vientos intensos. Al cierre de esta edición, el clima continuaba ventoso y el Servicio Meteorológico Nacional anticipaba un marcado descenso de temperatura para hoy.