En una maratónica votación, la FULP renovó sus autoridades
En unas elecciones signadas por rupturas y alianzas cambiantes, la Federación renovó su dirigencia por un año. La izquierda no llegó a un acuerdo y ganó un frente integrado por varias fuerzas, entre ellas Miles y Liberación
En una elección llena de marchas y contramarchas, la Federación Universitaria de La Plata renovó sus autoridades. Después de quince horas de negociaciones, las fuerzas de izquierda no pudieron llegar a un acuerdo amplio, por lo que la presidencia quedó en manos de una alianza entre la JUP, Miles, Periodismo Militante, el Partido Comunista y Quebracho. Por otro lado, la vicepresidencia quedó en manos de otro frente conformado por La Mella (Patria Grande), la Juventud Guevarista y Ya Basta! (Nuevo Más).
Negociaciones intensas
La lista ganadora obtuvo 52 votos. Los primeros seis meses la presidencia la ejercerá el estudiante de Psicología Mateo Compagnucci (Utopía – MILES) y la segunda mitad del año el lugar será ocupado por Marcel Aguilera de Periodismo (La Walsh). Por su parte, la lista 12 de Mayo de la La Mella (Patria Grande) quedó en segundo lugar con 35 votos, y ocupará la vicepresidencia.
El congreso que terminó definiendo la nueva conducción se inició el viernes al mediodía y terminó el sábado a las 8 de la mañana. Durante las horas de discusión de listas, hubo momentos de gran paridad entre fuerzas de izquierda y agrupaciones cercanas al kirchnerismo, al punto de que se había acordado firmar el empate y postergar el congreso dos semanas más.
Sin embargo, cerca de las seis de la mañana pasó algo inesperado que pateó el tablero. Franja Morada, que históricamente presenta lista propia o se ausenta, ofreció sus congresales a La Mella-Patria Grande para evitar el triunfo del kirchnerismo. La organización que ocupó la última presidencia los rechazó: ganar con votos de la agrupación radical lo hubiera dinamitado políticamente.
Sin apoyo de la izquierda
La izquierda tradicional y La Mella-Patria Grande no pudieron cerrar un acuerdo. El Partido Obrero (PO) y el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS) se negaron tajantemente a apoyar a La Mella, acusándolos de ser cercanos al kirchnerismo. Paradójicamente, ese escenario favoreció que la alianza con sus fuerzas afines se quedara con la elección.