Ciencia

La expedición lunar china regresa a la Tierra

El satélite natural es el mayor foco de atención del gigante asiático.

La pandemia no afectó el avance implacable del programa espacial chino, que en julio lanzó una nave robótica a Marte y, hace unas pocas semanas, otra a nuestro satélite, con el objetivo de extraer muestras de su suelo (regolito lunar).

China está a punto de convertirse en el tercer país que logra traer a la Tierra muestra de suelo y rocas lunares, después de Estados Unidos y la ex Unión Soviética. Es el primer intento en más de 40 años de enviar una misión a la Luna. Según las autoridades espaciales, esta misión constituye una nueva fase del programa espacial chino, que a principios del año pasado consiguió –por primera vez en la historia– el alunizaje en la cara oculta del satélite.

La sonda lunar, denominada Chang’e 5, pesa 8,2 toneladas y posee cuatro partes: un orbitador, un módulo de aterrizaje, uno de ascenso y una cápsula de regreso. La zona incursionada por esta sonda fue Mons ­Rumker, un montículo volcánico ubicado en una llanura de lava en la cara visible de la Luna. El plan establecido fue recoger dos kilos de rocas y otros escombros, para lo cual se taladrará la superficie, que luego se trasladarán al módulo orbitador para emprender el regreso a la Tierra.

Noticias Relacionadas