Rescatistas platenses vuelven a la Patagonia para ayudar en la zona de los incendios
Llegarán en la jornada de hoy para brindar asistencia humanitaria a las áreas más afectadas por la emergencia. También entregarán insumos esenciales, herramientas y donaciones recolectadas.
Rescatistas de La Plata vuelven a la Patagonia con el objetivo de brindar ayuda en la zona afectada por los incendios.
Se trata de un grupo de 15 socorristas del Cuerpo de Evacuación y Primeros Auxilios (CEPA), cinco voluntarios de la ONG Barómetro y dos médicos, que salieron anoche desde la ciudad de Pompeya (provincia de Buenos Aires) y llegarán en las últimas horas de hoy a El Bolsón.
“Vamos a estar un total de nueve días de misión para brindar asistencia médica y colaborar en la reconstrucción de viviendas afectadas”, le dijeron a diario Hoy desde la organización. También entregarán insumos esenciales, herramientas y donaciones recolectadas.
En las últimas horas se sumó a las tareas de extinción de los incendios forestales el bombero de Berisso Guillermo Fischer, formando parte del equipo de la Brigada Forestal de la Federación Bonaerense de Asociaciones de Bomberos Voluntarios, quien viajó junto a 30 efectivos de diferentes cuarteles de la provincia de Buenos Aires a la localidad de Junín de Los Andes en la provincia del Neuquén.
Los incendios ya consumieron 37.000 hectáreas de bosque solo en las provincias del sur del país, donde hay más de 700 familias evacuadas. La comunidad enfrenta una situación crítica mientras las autoridades intentan controlar los focos activos.
Alivio
Las lluvias del día domingo en El Bolsón trajeron algo de alivio tras jornadas de fuego descontrolado, sin embargo, la situación sigue siendo crítica.
Ayer, más de 400 combatientes y siete medios aéreos afrontaban las llamas en la ciudad rionegrina y en un paraje cercano tuvo que ser evacuado de forma preventiva, a raíz del avance del frente de los incendios forestales hacia un sector poblado.
Según explicó Alejandro Namor, jefe del Cuerpo de Bomberos de la localidad, el fuego se volvió muy agresivo y sigue avanzando pese al esfuerzo de los brigadistas.
Namor describió las condiciones extremas que enfrentan, con vientos que alcanzan los 90 kilómetros por hora, lo que complica aún más el control del fuego.