Ringuelet: un comedor escolar se nutre con su propia cosecha

Todo comenzó hace un año, con un rincón ocioso en donde solo crecía el pasto. Entonces, docentes y alumnos de la Escuela Primaria nº 60 “Hugo Stunz” de Ringuelet se propusieron concretar un viejo anhelo: una huerta propia. Consultaron al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), quienes los incluyeron en el programa Pro Huerta, les entregaron semillas y les brindaron charlas de capacitación. Entonces pusieron las manos en la tierra.

Hace algunas semanas, la huerta dio sus primeros frutos: tomate, pimientos, hierbas aromáticas, lechuga, cebolla de verdeo y otros vegetales. Estos acompañaron los almuerzos de los chicos, volviéndolos variados y saludables.

Pronto, el proyecto traspasó las paredes de la escuela y el concejal Guillermo Ronga impulsó que se declare de interés municipal. Además, se produjo una réplica virtuosa, cuando varios chicos llevaron la idea a sus familias y ahora están armando sus huertas domésticas.

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