Se realizó el recambio de la dotación invernante en la base Esperanza

La base argentina Esperanza, que se trata del único asentamiento antártico donde invernan familias, fue reabastecida y se le realizó el recambio de la dotación invernante. Se dio en el marco de la primera etapa de la Campaña Antártica de Verano (CAV).

Cabe resaltar que se replegó a niños en un helicóptero del rompehielos ARA Almirante Irízar entre el sábado y la madrugada de ayer.

En este sentido, con una temperatura de -2 °C y nevada, el buque desembarcó con lanchas y el “grupo Playa” materiales de construcción, víveres refrigerados y congelados, tambores con carga personal y tubos de gas, y los depositó en la base administrada por el Comando Conjunto Antártico (Cocoantar), que se encuentra en el norte de la península antártica.

Al respecto de la nueva dotación, el rompehielos trasportó a un contingente de 21 personas de un total de 25 que viajaron desde la ciudad de Buenos Aires. Acerca de las restantes cuatro personas, seguían la jornada pasada en el buque debido a que se prevé que desembarquen antes de que el Irízar arribe a la base Marambio, estimado para el lunes.

A su vez, fue replegada de la base el grupo saliente, conformado por 60 personas en total. Las familias en helicópteros Sea King, y el resto de la dotación, en lanchas.

En este contexto, a la base irán 14 niños, que tienen entre 4 y 15 años, dentro de las nueve familias, y se estima que las familias de la dotación entrante llegarán en el próximo marzo.

Cabe resaltar que entre familias y personal militar invernarán 60 personas en Esperanza, que se destaca por ser la única base argentina que cuenta con una escuela, que se trata de la número 38 Presidente Raúl Ricardo Alfonsín, y la única con radiodifusora, LRA36 Radio Nacional Arcángel San Gabriel.

La base Esperanza

En tanto, la vista aérea muestra a Esperanza como un pequeño poblado y la base se encuentra rodeada de glaciares.

Allí, al recorrer el sitio a pie se puede divisar que las viviendas están sujetas con tensores de acero fijados al suelo.

Por su lado, el teniente coronel Juan Paulo Escobedo, quien es el nuevo jefe de base, que participó del reabastecimiento, le detalló a Télam: “Mi objetivo es seguir trabajando acá como lo vienen haciendo el resto de las dotaciones en las Antártida; mejorar día a día para que el que viene tenga una mejor base, que hagamos soberanía en este lugar tan inhóspito del continente antártico y colaborar con el personal científico para invernar”.

Por otro lado, se espera que hoy el buque se dirija a la base Marambio, en donde las familias salientes se subirán a un vuelo programado para el martes en un Hércules C-130 hacia Río Gallegos y, de ahí, a la estación aérea de El Palomar.