ciencia
Webb y Hubble logran la vista más colorida del universo
Ambos telescopios espaciales se unieron para estudiar un cúmulo de galaxias expansivo ubicado a unos 4.300 millones de años luz de la Tierra.
Con el objetivo de estudiar un cúmulo de galaxias expansivo conocido como MACS0416, que está ubicado a unos 4.300 millones de años luz de la Tierra, los megatelescopios James Webb, de la NASA, y Hubble se unieron y alcanzaron una de las vistas más completas del universo jamás tomadas.
La NASA señaló que la imagen revela una gran cantidad de detalles que solo son posibles de capturar combinando el poder de ambos telescopios espaciales.
Asimismo, se informó que esta fue la primera de una serie de vistas superprofundas y sin precedentes del universo provenientes de un ambicioso programa colaborativo.
“Estamos aprovechando el legado del Hubble al avanzar hacia distancias mayores y objetos más débiles”, dijo Rogier Windhorst de la Universidad Estatal de Arizona, quien tomó las observaciones de Webb.
Es que, si bien Hubble fue pionero en la búsqueda de algunas de las galaxias más débiles y más jóvenes, la visión infrarroja de Webb refuerza esta visión profunda al adentrarse aún más en el universo primitivo con su visión infrarroja.
El experto explicó que para llegar a la imagen, en general, las longitudes de onda de luz más cortas se codificaron con colores azules, las longitudes de onda más largas en rojo y las longitudes de onda intermedias en verde. La amplia gama de longitudes de onda, de 0,4 a 5 micrones, produce un paisaje de galaxias particularmente vívido.
“El panorama completo no queda claro hasta que se combinan los datos de Webb con los datos del Hubble”, dijo Windhorst.
Esos colores dan pistas sobre las distancias de las galaxias: las galaxias más azules están relativamente cerca y a menudo muestran una intensa formación estelar, como lo detecta mejor el Hubble; mientras que las galaxias más rojas tienden a estar más distantes, como lo detecta Webb. Algunas galaxias también parecen muy rojas porque contienen grandes cantidades de polvo cósmico que tiende a absorber los colores más azules de la luz estelar.
Vale aclarar que el equipo de investigación combinó sus tres épocas de observaciones, cada una con semanas de diferencia, con el fin de buscar objetos cuyo brillo observado variara a lo largo del tiempo, conocidos como transitorios.