Ante miles de personas, el papa Francisco pidió "dejar de lado los personalismos"

El papa argentino encabezó hoy la misa en el Parque Bicentenario de Quito ante más de un millón de personas y pidió “dejar de lado los liderazgos únicos”

El papa Francisco pidió “dejar de lado los liderazgos únicos” al oficiar en el Parque Bicentenario de Quito, en Ecuador, una misa campal ante más de un millón de personas, a las que llamó a “cuidarse unas a otras” como nueva “revolución” que recuerde las luchas por la independencia de Hispanoamérica e “impulse la unidad”.

Francisco mantuvo un encuentro con los Obispos del Ecuador a las 9 (11 hora argentina) y una hora después subió al papamóvil para recorrer el parque y saludar a los fieles, muchos de los cuales acamparon bajo la lluvia intermitente de la capital ecuatoriana y el frío de la noche a 2.800 metros de altura.

El papa recordó "el grito de la Independencia Hispanoamericana" y subrayó la necesidad de la Iglesia de evangelizar. "Eso es evangelizar, esa es nuestra revolución, porque nuestra fe siempre es revolucionaria, ese es nuestro más profundo y constante grito", dijo.

En ese contexto, recordó la celebración del Bicentenario de la Independencia de Hispanoamérica al asegurar que nació de "la conciencia de la falta de libertades, de estar siendo exprimidos y saqueados".

Francisco indicó que la violencia es “manifestación de ese ´difuso individualismo´ que nos separa y nos enfrenta”, y por eso llamó a que “el grito de la misa” en el Parque Bicentenario sea “un clamor nacido de la convicción de impulsar la unidad”.

Banderas de Ecuador y de otros países y unas más con el rostro de Bergoglio, además de globos, cruces y otros objetos de carácter religioso levantaban los fieles al paso de Francisco, a quienes miles esperaron en el lugar desde la noche del lunes.